29 oct 2006

PROMETEO Y EL PERIODISMO

La editorial Prometeo libros presenta el libro: "Periodistas y magnates: estructura y concentración de las industrias culturales en América Latina."

La cita será el lunes 6 de noviembre a las 13 hs en el Hotel NH City (Bolívar 160). Allí Horacio Verbitsky y Danilo Arbilla presentarán el citado libro junto a sus autores, Guillermo Mastrini y Martín Becerra.
El evento forma parte de un seminario sobre "El periodismo en medios concentrados en América latina" que organizan el Instituto Prensa y Sociedad (IPyS) y FOPEA. El libro contribuye al debate sobre el pluralismo y la diversidad de opiniones en los medios de comunicación.

"Cada año un ciudadano latinoamericano compra, en promedio, menos de un libro, asiste menos de una vez a una sala cinematográfica, adquiere medio compact disc por el circuito legal y compra un diario sólo en 10 ocasiones", destacan los investigadores Mastrini y Becerra en las conclusiones del libro editado por Prometeo.
"Los bajos niveles de acceso a la cultura mediada por soportes industriales se complementan con una estructura del sector altamente concentrada, en la cual las cuatro primeras empresas de cada mercado dominan (en promedio) más del 70 por ciento de la facturación y de la audiencia", sostienen los autores del libro, que sintetiza los resultados de la primera investigación sobre la estructura y los indicadores de concentración de las industrias culturales y las telecomunicaciones en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, México, Perú, Uruguay y Venezuela. En el prólogo, Armand Mattelart destaca "el mérito de la investigación que, con este libro, empieza a colmar el vacío de estudios del tema para los países latinoamericanos".
El desarrollo de este estudio –que organizó el IPyS, una ONG con sede en Lima, Perú ha contado con la participación de un destacado grupo de periodistas y académicos en la recopilación de datos y en la discusión de los informes de cada país: Andrés D'Alessandro (Argentina); Oscar Ordoñez y Raúl Peñaranda (Bolivia); James Görgen (Brasil); Carlos Eduardo Huertas (Colombia), Claudia Lagos y Raúl Rodríguez (Chile); Gabriela López y José Carlos Lozano Rendón (México); Carolina De Andrea, Adriana León, Humberto Coronel Noguera y Gabriel Chávez Tafur (Perú); Alexandra Dans (Uruguay); Andrés Cañizáles y Luisa Torrealba (Venezuela).

Los autores.
Guillermo Mastrini, consultor de Ipys, es profesor de la UBA, especialista en políticas públicas de comunicación. Es editor de los libros "Mucho ruido, pocas leyes: economía y políticas de comunicación en la Argentina" (2005) y de "Economía política, comunicación y conocimiento" (2005), éste último con César Bolaño y Francisco Sierra. También edita el boletín electrónico PNC, www.pyp-uba.com.ar. Desde 2006 se desempeña como Director de la Licenciatura en Cs. de la Comunicación de la UBA.
Martín Becerra, consultor de Ipys, es profesor de la U. Nacional de Quilmes (UNQ) e investigador del CONICET en políticas de comunicación. Doctor en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Autónoma de Barcelona (España), es autor del libro "Sociedad de la Información: proyecto, convergencia, divergencia" (2003). En 2005 fue Catedrático UNESCO en Comunicación por la U. Autónoma de Barcelona. Desde 2003 se desempeña como Secretario Académico de la UNQ.

20 oct 2006

ENTREVISTA CON IGNACIO RAMONET

PARA EL DIRECTOR DE "LE MONDE DIPLOMATIQUE",
DOS MIL MILLONES DE SERES HUMANOS EN LA MISERIA,

SIGNIFICA QUE "EL SISTEMA NO FUNCIONA"

París, 19 de octubre. Siempre es fácil sintetizar los grandes temas de la humanidad en pocas palabras o explicar el complejo entramado internacional con sencillez. Detrás de cada concepto, la síntesis y la riqueza pedagógica. Algunas de las virtudes de Ignacio Ramonet, periodista, doctor en Semiología y en Historia de la cultura, investigador, analista y por sobre todo, militante social.
Uniendo profesión y compromiso, a sus 63 años, no para ni un solo momento. Apuesta por un movimiento alter mundialista politizado y comprometido. Se entusiasma al convocar a un control ciudadano planetario sobre los medios de comunicación (Observatorio mundial). Cazador-cazado, "entrevistador"-entrevistado, Ramonet es generoso en palabras y pensamiento. "Su" Le Monde Diplomatique lo prueba.

Este diálogo, lo confirma.
- ¿En tanto que sistemático analista de lo "universal", cómo definiría la situación de nuestro planeta hoy, a pocos meses de concluir el sexto año del nuevo siglo?
- A partir de cuatro características. La primera, determinante, la globalización neoliberal. Es una particular dinámica político-económica, político-ideológica o económico-ideológica que marca el mundo hoy. La segunda, el unilateralismo estadounidense. Los Estados Unidos dominan el planeta, esencialmente a nivel militar, pero también en lo económico, tecnológico, cultural y ejercen una presión evidente sobre todo y todos. Otra marca de la etapa: una gran parte del mundo se encuentra marginalizada a partir de las lógicas antes mencionadas. Especialmente África, donde se concentran numerosos fenómenos trágicos, como el desempleo, las migraciones masivas, las enfermedades y pandemias… La cuarta característica, es la emergencia poderosa - que sin duda tendrá un particular significado y marcará la segunda mitad del siglo en curso- de importante regiones del continente asiático, en particular China e India.
- ¿Y América Latina en este particular concierto de la coyuntura mundial?
- Curiosamente vive un momento que yo lo definiría como el mejor de su historia. Especialmente en los últimos cinco años. Esto debido a tres razones. Por primera vez el conjunto del continente no padece las taras políticas que lo han caracterizado en otros momentos de su historia con las dictaduras militares. Por otra parte, por primera vez también, este movimiento democrático permite la llegada al poder de sectores de la oposición de centro-izquierda o de izquierda, que ocupan gobiernos y desde allí impulsan cambios democráticos que esos países necesitan. Por otra parte, y tercer argumento, este particular momento político coincide con una bonanza económica significativa a escala internacional, en particular a partir del fin de la crisis de materias primas y esto está produciendo índices de crecimiento en su conjunto como quizás nunca antes había conocido América Latina. Se dan, entonces, condiciones objetivas tanto políticas como económicas para que se produzca el tan ansiado despegue económico. Y por primera vez, en conjunto, desde su independencia en el primer tercio del siglo XIX se produzca con la constitución o la consolidación de las clases medias que tan importantes han sido.
- Volviendo al estado del planeta tierra, polarizado e ilógico, y retomando el análisis anterior, parecería que nos dirigimos a un pico de embudo, punto máximo de las contradicciones internas a nivel mundial…
- Absolutamente. Y esto tiene su explicación. La dinámica actualmente hegemónica, la globalización, se apoya en una doctrina que es el neoliberalismo que hace de la competencia y la competitividad, su característica esencial. Y en nombre de esa globalización se da una batalla casi generalizada, en la mayoría de los países, del mercado contra el Estado y del sector privado contra el sector público. Y que incita a los individuos a confrontarse con las colectividades o comunidades. Es una batalla mundial que hace que el territorio -en su sentido abstracto-, es decir el espacio que poseían el Estado y los servicios públicos, en todas partes, decrezca. Y por eso se da la paradoja que en muchos lugares donde hay un gran crecimiento económico también se constata una gran desesperación social. Es la característica del planeta hoy: tanta riqueza acumulada y al mismo tiempo 2 mil millones de personas que viven en la miseria.
- Paralelo a esta dinámica dominante, se constata una enorme avalancha continua de información. Se vive, también, la paradoja de mayor cantidad de información y, al mismo tiempo, una ciudadanía planetaria que parece estar cada día más desinformada. ¿Es real esa paradoja?
- Coincido plenamente con el enunciado y agradezco que introduzcas este tema. Es muy real esta contradicción principal. En un mundo que en razón de los grandes avances tecnológicos, especialmente de los últimos 15 o 20 años, produce más información que nunca -la avalancha gigantesca de la que hablas- a través de prensa escrita, radio, TV e Internet. Pero en el que al mismo tiempo se constata un fenómeno creciente de desinformación o mala información. Los medios de comunicación tan desarrollados en lo tecnológico, han cambiado de campo, se han pasado al adversario.
- ¿En ese sentido se inscribe su tesis, lanzada hace sólo algunos años en el marco el Foro Social Mundial, sobre la necesidad de una "ecología de la información"?
- Lancé esa idea en Porto Alegre en la perspectiva de impulsar la creación del Observatorio Internacional de los Medios que se materializó. En la perspectiva de promover un quinto poder y que los ciudadanos trataran de recuperar una información propia, limpia, contra la información del poder. La información, de la misma manera que nuestra naturaleza y el medio ambiente, se ha contaminado con parásitos, bacterias y pesticidas. Y de igual forma que intentamos defender el medio ambiente, debemos también tratar de desintoxicar la información de todas las mentiras. Y esto pasa por una reapropiación. Internet lo permite hoy. En ese marco tan pesimista que describo, hay luces de esperanza. En particular porque existen, gracias a Internet, muchas redes que tratan de contra- informar. Y nunca como ahora fue tan eficaz la contra-información.
- ¿Se han dado pasos positivos o avances concretos en ese camino de reapropiación de la información por parte del ciudadano?
- Existe la conciencia que los medios no están funcionando como corresponde. Pero es difícil pasar de esa conciencia a la acción. La experiencia de los últimos años me indica que muy rápidamente se puede caer sólo en el discurso militante. Y se piensa que por decir lo contrario que dice la prensa dominante ya es bueno. Pero a veces lo contrario no es correcto o no es suficiente. Los ciudadanos sienten que la información no funciona pero no cada individuo es un periodista. No es tan simple trabajar la materia prima informativa.
- Disputas y búsqueda de alternativas…Tanto en los medios de comunicación como, más globalmente, en la sociedad. ¿Qué etapa transita el movimiento alter mundialista que se bate por "otro mundo posible"?
- El altermundialismo, la búsqueda de opciones y alternativas a nivel planetario, ha sido una de las grandes novedades de estos últimos 7 u 8 años. Indiscutiblemente es el actor político nuevo que más curiosidad e interés ha suscitado. Al cabo de los 6 años de la creación del Foro Social Mundial, que es el elemento catalizador de este movimiento, estamos en un momento de reflexión. Sin duda el entusiasmo de los dos o tres primeros años - ndr entre el 2001 y el 2003 se reunió en Porto Alegre- decayó un poco. Nunca fue tan intenso como ahora el sentimiento que hay que hacer algo diferente porque lo que está en marcha a nivel de modelo planetario no marcha. Pero nos damos cuenta que el movimiento está patinando. Es decir, dando vueltas sobre sí mismo.
Hay que reconocer que el espacio político e ideológico del FSM se ha reducido. Y lo digo teniendo en cuenta dos criterios. La confrontación central hoy es entre los Estados Unidos y el islamismo radical. En ese escenario el movimiento altermundialista se distancia de uno y de otro. Tanto del neo militarismo estadounidense como del islamismo radical y sus métodos espantosos. En esa confrontación, se juega un papel de "observador". Y en política, todo rol de observador implica inercia y falta de iniciativa.
El segundo aspecto. El movimiento surgió con la idea central de que las cosas se pueden cambiar desde abajo. Que no es necesario conquistar el poder para cambiar una realidad, en continuidad con el pensamiento zapatista del subcomandante Marcos. Que de una u otra forma sostiene que se puede cambiar la sociedad cambiando cada elemento de la misma, desde abajo. Y luego, sea cual sea el gobierno, éste va a tener que aceptar la realidad de una sociedad cambiada. Era en cierta manera, una de las ideas predominantes en torno a las cuales surgió el FSM. Pero en América Latina, justamente donde nació el Foro, llegaron al Gobierno diversos actores progresistas, sea en Brasil, Bolivia, Argentina, Venezuela etc. Y están logrando cambiar las cosas.
Recapitulo: ante el hecho de ser mero espectador del enfrentamiento principal actual a nivel planetario y de ver que las transformaciones se hacen desde el poder reformado a través de gobiernos progresistas…el movimiento se ha reducido. Creo esencial que el movimiento altermundialista escoja su campo y fije un programa. Lo propuse hace dos años en Porto Alegre junto con una serie de personalidades. Encontramos una docena de puntos que hacían la unanimidad aunque manteniendo la diversidad. Sigo pensando que hay que integrar esos doce puntos como objetivos y empujar todos hacia el mismo lado. De esta forma el movimiento recuperaría un sentido y se comprometería con una posición política.

(Sergio Ferrari –ANC-UTPBA)

18 oct 2006

VERGUENZAS ARGENTINAS

Los hechos vergonzantes que envolvieron los actos del traslado de los restos de Perón a la Quinta de San Vicente no son explicables desde las comunes palabras. Ningún adjetivo sirve para calificar este tipo de realidades. Esta es una historia que se repite en el tiempo y que nos conecta con aquel escenario de El Matadero de Esteban Echeverría. Claro que aquello era una visión de 1830 y ahora estamos en el presente: como si nada hubiera ocurrido en ese inmenso transcurso de tiempo, como si nada hubieramos aprendido de tanta sangre y tanto dolor...
Por no tener palabras sanas para explicarnos, publicamos a continuación, una reflexión del amigo García Costa. Este texto fue escrito muchas horas antes de que comenzara el acto. Quizás refleje alguna realidad que lleve a alguna reflexión. Quizas sólo refleje el horror con que algunos argentinos enfrentamos lo que comienza a partir de hoy.

LA CURIOSA NECROFILIA DE LOS ARGENTINOS

Por Víctor O. GARCIA COSTA

El culto a los muertos es tan antiguo como la humanidad. Somos estrictamente respetuosos de ello a pesar de ser partidarios de la donación de órganos, de la cremación y de la aventación de las cenizas. Es lo que queremos que se haga con nuestro cuerpo muerto.

Pero debemos reconocer que no conocemos otro pueblo en el mundo en que los cadáveres o partes de ellos sean objetos de una manipulación que va más allá del normal manejo de los cuerpos muertos, esto es: del velatorio, el sepelio, el retiro de restos y la reducción de los mismos.
Entre nosotros hay cientos de episodios de manipulación de cadáveres y de partes de ellos que no son normales. Y no lo son por el trato desconsiderado, cuando no salvaje, que se hace de esos restos, en detrimento del respeto que debe haber por ellos y por los sentimientos de los deudos.
El caso más flagrante es el ocultamiento que se hace, hasta hoy, de los cuerpos de los detenidos-desaparecidos de la última dictadura, fueran combatientes o no lo fueran. Así, las Fuerzas Armadas que se niegan a informar, impiden a los familiares de las víctimas que puedan hacer su luto y cerrar, con todo el dolor imaginable, ese capítulo de sus vidas. Aunque sabido es que los cuerpos arrojados al mar, dado el transcurso del tiempo, son prácticamente irrecuperables, debería informarse sobre quiénes han tenido ese horroroso destino. Pero, además, por qué ocultar el lugar donde están enterrados los detenidos asesinados. Entre esos cuerpos ocultos está el de Mario Roberto Santucho.
Nuestra historia registra casos espeluznantes de manipulación de cadáveres: uno de ellos es el de Juan Genaro Berón de Astrada, al que después de muerto el 31 de marzo de 1839 en la batalla de Pago Largo, recibió 18 lanzasos, se le cortó una oreja y se le sacó una lonja de cuero de su espalda con la que se confeccionó una manea que se regaló a Juan Manuel de Rosas.
Otro es el caso de Francisco ’’Pancho’’ Ramírez, vencido en la batalla de Río Seco el 10 de julio de 1821, a quien se cortó la cabeza que se exhibía como trofeo sobre el escritorio de Estanislao López después de haber sido expuesta en el Cabildo.
También se cortó la cabeza de Marco Avellaneda, detenido y muerto en Metán el 3 de octubre de 1841, la que fue colocada en una pica en la plaza de Tucumán, de donde fué rescatada. Se trozó su cuerpo, pero antes se sacó una lonja de su espalda para hacer otra manea.
La cabeza de Avelino Viamonte, hijo del general Juan José Viamonte fue cortada y paseada por las calles al grito de ’’sandia calada’’.
El cuerpo de Juan Galo de Lavalle, muerto el 9 de octubre de1841 fue llevado desde Jujuy hasta Potosí, para impedir que su cuerpo fuera maltratado y vejado por sus enemigos.
Los restos de Juan Manuel de Rosas, estuvieron condenados por años a la expatriación por la sentencia poética de José Mármol: ¨ni el polvo de tus huesos la Amárica tendrá’’.
Los restos del general José de San Martín, fueron depositados después de agudas resistencias en suelo extracatedralicio, abandonado su cuidado por la Curia en 1884. El cajón está colocado inclinado cabeza abajo por su adhesión masónica.
Cuando se trasladaron los restos de Manuel Belgrano, los ministros Pablo Richieri y Joaquín V. González se llevaron, cada uno, un diente del prócer, que ante el escándalo provocado, devolvieron aduciendo que los querían mostrar al general Julio Argentino Roca.
Y, ya más cerca nuestro, el tratamiento bestial e irrespetuoso dado al cuerpo de Eva Perón después del golpe militar de 1955, robado de la Confederación General del Trabajo, llevado a Italia, donde permaneció sepultado con nombre supuesto y traido en canje por el cadáver de Pedro Eugenio Aramburu, también robado de su sepulcro. Ultimamente, el corte de las manos del general Juan Domingo Perón, sin que aún se haya descubierto a los autores de la profanación.Podríamos seguir.
De ninguna manera objetamos al traslado de los restos del general Perón a un mausoleo en San Vicente en tanto se lo haga respetuosamente y sin aprovechamientos ni actitudes subalternos. Simplemente queremos respeto por los muertos, por todos los muertos.

16 oct 2006

DIALOGO CON ANDREW GRAHAM-YOOLL

En las mesas de un bar al aire libre, con tapas consumidas al sol en un domingo primaveral bien madrileño (¡rodeados por turistas que iban camino de una corrida de toros!), se realizó esta entrevista que luego fuera publicada en LA NACION.
La entrevista todavía guarda mucha información e ideas de actualidad, razón por la cual la estamos subiendo a este blog, especialmente ahora que conocemos un poco más a este periodista cuya trascendencia trasnscurre sobre las dos naciones a caballo de las cuales siempre ha vivido. Los sucesos que en estos momentos se viven en nuestro país encuentran en este dialogo una interesante resonancia que queremos destacar y que seguramente no escaparán al lector avisado.

Sobre Memorias del miedo, un libro sobre los años de la dictadura,
que tuvo a diferencia de la Argentina, buena acogida en España

Dialogo con Juana Libedinsky
Fuente: diario La Nación.

"Sabemos que tenemos que estar muy enojados por las Malvinas, pero no sabemos qué línea de acción tendríamos que adoptar con el Reino Unido. ¡Si ni siquiera sabemos qué línea hay que adoptar con Uruguay! Es ridículo..."
Quien así se lamenta es Andrew Graham-Yooll, escritor, periodista, emblema de lo anglo–argentino y, desde 2005, director del Buenos Aires Herald por segunda vez (ya lo había sido de 1996 a 1999). Dice todavía más: "Guido Di Tella, nos gustara o no, tenía una idea clara de lo que quería para las islas. Hoy la Argentina no tiene ninguna política exterior". Sobre sus ideas, Graham-Yooll asegura: "Nunca tuve militancia política, pero sí militancia periodística". Siempre fue amigo de decir y publicar lo que pensaba, sin demasiados eufemismos. Eso le costó el exilio en 1976, durante la dictadura militar. Sólo retornó al país 18 años más tarde, después de trabajar en los diarios The Daily Telegraph y The Guardian, de dirigir las revistas South e Index on Censorship y de integrar, como profesor invitado, el plantel docente de la Universidad de Cambridge. "Aproveché esa oportunidad para dedicarme al buen vino", aclara, con esa tendencia británica a no tomarse muy en serio.
La visita de Graham-Yooll a la península ibérica durante la cual tuvo lugar esta entrevista se debió al éxito de la flamante edición española (realizada por Libros del Asteroide) del libro que escribió sobre los años oscuros de la Argentina, "Memorias del miedo". "Fascinante y revelador", lo calificó El País; "Un libro tan importante, de tal fuerza moral, que hasta es capaz de conmocionar a periodistas expertos", dijo, por su parte, el ABC. Mientras tanto, "Ocupación y reconquista" (Lumière), libro en el que analiza, con la singular perspectiva que le da el hecho de pertenecer a dos culturas, las invasiones inglesas, a 200 años de haberse producido, llegó este mes a las librerías porteñas. Lo mismo ocurrió con "War/Guerra", la antología bilingüe de la poesía de su amigo Harold Pinter, que Graham-Yooll tradujo para Ediciones de la Flor.
-¿Cómo compara las relaciones entre la Argentina y el Reino Unido en sus dos períodos como director del diario? -Yo volví a la Argentina cuando Carlos Menem ya había iniciado contactos que permitirían llegar pocos meses después al restablecimiento de las relaciones diplomáticas. Creo que las políticas exteriores de entonces y las de la actualidad no podrían ser más distintas, básicamente porque hoy no tenemos ninguna política exterior. Que hay que sentir bronca por las Malvinas, hasta ahí sabemos, pero no mucho más. El canciller Guido Di Tella, nos gustara o no, tenía una idea clara de lo que quería. Su fraseología era lamentable, pero ésa era su idea del humor, que no todos entendieron. De todos modos, el discurso de Néstor Kirchner este 2 de abril fue moderado, bajó los decibeles. Hay cosas que se deben rescatar, como el reconocimiento a los veteranos de guerra, porque fue una infamia lo que se hizo en 1982-1983. Fue como el regreso de un equipo derrotado. "¡Hurra, hurra!" cuando van y, a la vuelta, "si te he visto, no me acuerdo". Ahora veo un comienzo de reconocimiento que, para bien o mal, la sociedad les debe a los veteranos. -¿Cuál sería el modelo? -En Crimea, por ejemplo, los británicos tuvieron la carga de la caballería ligera. Lord Cardigan tenía una borrachera que volaba y mandó a sus tropas contra los turcos. Fueron masacradas, pero se reconoce hasta en la poesía el valor de aquellos soldados. Tenemos que hacer lo mismo como sociedad, y esto se extiende también a lo que nos sucedió en la década del 70. No es que todo se haya podrido de golpe y que la crueldad haya aparecido de la nada en marzo del 76. El discurso en este sentido es todavía demasiado estridente: hay muertos malos y hay muertos buenos. No debería ser así. La única forma de entender lo que nos pasó es reconociendo lo que hicimos como sociedad. -¿Se pregunta a veces qué hubiera pasado de no haber mediado la Guerra de las Malvinas? -LA NACION publicó una entrevista con Carlos Ortiz de Rozas, y estaba diez puntos lo que él decía: que de no haber existido una ocupación de las Malvinas hoy las islas serían argentinas. A Margaret Thatcher y al Foreign Office en 1981 no les interesaban las islas. ¡Galtieri los obligó a interesarse! La historia la conocemos. Ahora lo que nos queda es reconocer el error y reconocer a los jóvenes que fueron sacrificados. -En su libro sobre el otro conflicto histórico entre argentinos y británicos, las invasiones inglesas, usted dice que las palabras con las que Whitelocke justificó su fracaso fueron premonitorias. ¿Por qué? -Lo de Whitelocke me parece una ironía de la historia. El derrotado hizo su descargo de esta forma: "Cuanto más conocen los soldados la abundancia que ofrece este país y la facilidad con la que se puede adquirir, mayor es el mal, dado que la tentación que ofrece esta tierra es irresistible". Así, describe de un plumazo la riqueza de esta tierra y la vida fácil que le da al hombre. ¡Es tan fácil todo en la Argentina que la gente se corrompe! Ya lo dice la frase popular: "¡Qué país generoso!" Somos una sociedad corrupta. Siempre buscamos el camino más sencillo. De modo que el vilipendiado villano Whitelocke escribió una línea para la historia, que hemos preferido ignorar. -En sus años en Londres usted trabajó en diarios y revistas. ¿Qué diferencias encuentra entre la prensa británica y la argentina? -Lo que me encanta de la prensa británica es la calidad de la redacción y la escritura, lo que se llama el quality writing. Sus columnistas son, muchas veces, de una absoluta exquisitez. La otra cosa notable de la prensa británica -si bien es algo que muchos detestan- es el periodismo de tabloide, que nunca se detiene ante los límites y que siempre va adelante para forzarlos. A veces esto termina en horrendas invasiones de la intimidad de las personas, pero más valen esos errores que una prensa que se repliega por miedo y mezquindad. De eso tenemos que aprender los argentinos. Quiérase o no, desde la muy difamada década de los 90, la de Carlos Saúl Menem, hemos tenido muchísima libertad de prensa. Pero no es una prensa que salga a ver cuáles son los límites. -¿Cómo ve el futuro del periodismo argentino? -La prensa argentina tuvo su auge en la primera mitad del siglo XX. La Prensa decía vender 700.000 ejemplares. Después vino la decadencia. Ahora llevamos unos diez o quince años reentrenándonos, volviendo a hacer buenos periódicos, con buenos redactores. La gente joven que está llegando a los diarios desde las universidades es excelente, ambiciosa. Sabe buscar una nota. Yo les bajaría la calificación en cuanto a la calidad de la escritura, que es lo que decía antes, pero hay que tener esperanza. Espero que todos estos chicos crezcan en su escritura y que no se vayan a la televisión. Los sueldos serán un poco menos malos en la pantalla chica, pero ¡quédense, que los necesitamos! -¿Cómo es la historia del célebre eslogan del Herald: "Publicamos en inglés lo que no se puede decir en castellano"? -Precisamente ayer alguien me preguntaba sobre ese eslogan un tanto vanidoso, que, en realidad, ya no usamos. Viene de la primera época del peronismo, cuando, por ejemplo, se ponía de contrabando el comentario político en las páginas de noticias marítimas, bajo un titular inocuo. Después se perpetuó y tenía alguna medida de verdad, pero es un eslogan de hace medio siglo. Lo interesante es que nunca se usó como propaganda en la última dictadura: sólo era una idea que se daba a entender. Ahora ponemos: "Un mundo de información en pocas palabras". -¿Y cuán diferente es esta vuelta al comando del Herald del primer arribo, en 1994? -Es otra época, obviamente, y es una experiencia totalmente distinta. La primera vez yo había llegado con expectativas, en parte, erróneas. En 1994 creía que estaba volviendo al Herald que había dejado en 1976. Pero era otra Argentina: el trabajo se había vuelto mucho más duro y el Herald se había convertido en una voz muy minoritaria de una colectividad que disminuía dramáticamente. Para colmo, además de director me pusieron de presidente del directorio, para cambiar el diario por dentro. Era muy gris, anticuado, y yo quería hacerlo más ruidoso y estridente. Bueno, ¡terminé con un infarto! Esta vez regresé en agosto de 2005 con el pedido de que retomara la dirección, pero sin las responsabilidades dramáticas de entonces y con una redacción más tranquila y cohesionada, con mucha de esta gente joven de la que hablaba, llena de energía. Además, estos doce años estuve en la Argentina. No caí en un paracaídas, como en 1994, creyendo que todos me iban a besar en la frente, y eso fue importantísimo. -¿Cómo fue su acercamiento a la poesía de Pinter? -La comencé a publicar en la revista Index on Censorship, un poco como desafío a los que lo criticaban a él, y luego a mí, desde el Sunday Times. Busqué la pelea. La poesía de Pinter es provocativa, brutal y escatológica, pero muy justa y precisa, y por eso llega a destino. Lo que dice no es "poético", pero se ajusta a la ideología del autor y al ambiente violento que ataca. Claro, Harold es conocido por su teatro, no por su poesía, por lo que el interés es limitado. Las cosas fueron lentas, pero el editor Daniel Divinsky amablemente accedió a publicar mis traducciones. Todo se aceleró cuando, en octubre de 2005, Harold recibió el premio Nobel. A mí, personalmente, siempre me pareció que Harold podría haber sido parte de Buenos Aires. Hay algo en su obra dramática que pertenece a esta ciudad. -¿Cómo fueron sus comienzos en el periodismo? -Graham Greene dijo alguna vez que había entrado en The Times para aprender a escribir. Después la experiencia le resultó de lo más aburrida y se dedicó a apostar con un compañero para ver quién escribía los peores titulares. Encima perdió. Pero de todo eso rescato el motivo por el que Greene se metió en el periodismo, porque yo también, sin experiencia alguna, entré en el Herald queriendo ser escritor, o quizá cronista de cultura. Claro que al poco tiempo tuvimos la caída de Illia y la llegada de Onganía, y toda la percepción del periodismo fue cambiando. Y yo con ella, así que pasé a cubrir política. ¡Tanto me fascinó hacerlo que terminé exiliado! -¿Y por qué volvió a la Argentina? -Inglaterra me dio privilegios que jamás hubiera hallado en la vida. Me trataron lujosamente. Eduqué ahí a tres de mis cuatro hijos, tuve una casa hermosa en Hampstead, en Londres, y me recibieron bien en todos los niveles. Fui afiliado al Partido Laborista durante toda mi residencia en Londres y participé en campañas electorales. Hasta recibí una condecoración de la corona. Con frecuencia me pregunta la gente: "¿Por qué volviste a la Argentina?" Porque nací aquí, pertenezco a este país y me sacaron a las corridas en 1976. Y es obligación volver al lugar de donde uno fue rajado para ver si es aceptado de nuevo. Creo que lo soy. Es más: uno pertenece a un lugar porque lo quieren y lo entienden, con sus debilidades, depresiones, borracheras y situaciones impredecibles. Algunos fueron duros conmigo. Un colega, a poco de regresar a la Argentina, en 1994, me dijo: "Vos pensás que todos en Buenos Aires te queremos. Bueno, te aseguro que por lo menos la mitad te detesta". Igual lo valoré mucho: nunca podría haber encontrado semejante sinceridad en otra parte.

13 oct 2006

OPINIÓN DE ENRIQUE GONZÁLEZ-MANET

Alineación de los medios y equilibrio informativo

Organismos especializados calculan que existen en el mundo unos 1.200 millones de receptores de televisión, 800 millones de computadoras, 2.000 millones de radios, 1.000 millones de líneas telefónicas y 400 satélites de comunicación. Por algunas de estas cifras responden la Comisión de Corporaciones Transnacionales de las Naciones Unidas y el Instituto de Estadísticas de la UNESCO. Sin embargo, ello no significa que haya mas información sobre el acontecer contemporáneo o la vida y necesidades de los casi 200 países que existen en el mundo.

Preguntémonos porque la UNESCO, único organismo del sistema de la ONU con vocación expresa para tratar los temas de educación, ciencia, cultura y comunicación, no ha indagado como se usan los medios y que efecto han tenido durante el último medio siglo, en particular desde la implantación de la TV, la transmisión digital y el uso del satélite.
¿Saben todos que hay un retroceso moral en el mundo, del cual no se habla? ¿Y que estas tendencias han explotado a partir de los flujos globales facilitados por las nuevas tecnologías de información? Después del aciago periodo de Torquemada, en la Edad Media, nadie pensó que fuera posible apoyar y utilizar la tortura como un método válido para lograr la verdad. La aprobación en Estados Unidos de leyes que amparan a los torturadores es un escándalo que desnaturaliza los valores del hombre.
Tampoco nadie consideró que surgieran cientos de empresas de cable que ofrecen pornografía fuerte después de la medianoche o que Internet sirviera para organizar vastas redes de pedófilos violadores de todas las normas sociales y que se renuevan con mayor rapidez con la que son capturados. Por otra parte, el aumento incontenible de la violencia y el desprecio a la vida deben mucho a un cine de alcance mundial que preconiza la muerte como solución a los problemas personales y aún empresariales.
La enseñanza que transmiten los diversos medios y cuyo contenido esta controlado por un reducido grupo de grandes corporaciones, lo que determina que Estados Unidos domine el 70% del mercado mundial del cine, es el afán de triunfo, poder y dinero, basado en una filosofía pragmática que rechaza toda ética y principios normativos. La lección parece ser el éxito a toda costa y a cualquier precio.
Desbalance de los medios
Estudios realizados por universidades escandinavas y publicados en la revista Nordicom hablan del desbalance de los medios y describen su aporte como dudoso para la educación, formación y enriquecimiento espiritual del hombre. Y no se trata sólo del nuevo género denominado "televisión basura", de contenido grotesco, y de los "talk show", que revelan el lado más oscuro y mezquino del ser humano, presentado como capaz de cualquier cosa por dinero o notoriedad.
Las investigaciones realizadas demuestran que el conocimiento y la cultura ocupan menos del 10% del tiempo de emisión televisiva y que incluso espacios deseables por su contribución al saber, como el "Discovery" y el"Learning Channel", realizan enfoques prejuiciados y etnocéntricos que tienden a tergiversar las culturas indígenas y el verdadero valor de los pueblos autóctonos. Los "muñequitos" no escapan a la manipulación, ya que son utilizados como instrumento de formación ideológica de derecha, como han revelado Ariel Dorfman y Armand Mattelart, y cuyo referente básico es "Para Leer al Pato Donald", editado en Chile, en 1973.
¿Quién gobierna los medios audiovisuales en el mundo? La oferta y la demanda, porque se trata de un negocio que debe producir ganancias. Una de las razones de su baja calidad es la necesidad de complacer al usuario, quien gusta de lo intrascendente y espectacular. Este sistema educa al consumidor en esas tendencias. Por ejemplo, el canal 13 de México, orientado por la Universidad Nacional Autónoma, tenía uno de los más bajos ratings del país y estaba muy lejos de poder competir con el "chavo del ocho" o el "chapulín colorado", de Televisa, seriales infantiles seguido por los adultos.
Los esfuerzos realizados por algunos gobiernos de América Latina para impulsar la cultura universal no han dado resultado, pues los temas no atraen al ciudadano medio, que busca la distracción más que la instrucción. Un proyecto oficial excelente como Antena 5, en Francia, tampoco pudo competir con la empresa privada y la naturaleza comercial de los grandes medios. Hasta ahora estos procesos demuestran que es un problema lograr una información de calidad y valor social, acorde a los objetivos de desarrollo del país.
¿Por dónde van los medios?
Los equipos de computación y TV se hacen cada vez más accesibles para la clase media. Hay un aumento de la técnica, con mayor impacto para la distribución y el consumo, pues el grupo familiar ya no tiene que depender de un solo receptor. Esto significa que se van a diversificar y también reafirmar tendencias previstas.
Ya en muchos países hay más televisores que personas. En algunos casos hay equipos en la sala, comedor, cocina, baño y en cada cuarto. En contraste, en algunas aldeas africanas cuentan con un televisor accionado por acumulador y celdas solares. La capacidad de ver y pensar tiene gran efecto sobre la cultura, por lo que conviene indagar sus consecuencias.
Recientemente, el Grupo Nielsen de Investigaciones, de New York, verificó que .más de la mitad de los hogares norteamericanos cuentan con tres equipos de TV, aunque algunos poseen hasta ocho. Se estima que con el desarrollo de las pantallas planas de plasma podrán verse equipos de TV en los lugares más insospechados. Este fenómeno ha generado una mayor diversidad de canales temáticos, difundidos por un número menor de productores. Otro hallazgo es que hay un notable aumento de audiencia, especialmente entre 12 y 17 años, así como una mayor recepción nocturna por muchachas adolescentes.
Nielsen estima que estas novedades incrementan el mercado y que ello se debe en parte a la transformación de las tecnologías en los países desarrollados. Un ejemplo es un concierto para teléfonos celulares y orquesta, del compositor David Baker.
El impacto de la técnica
Luces rojas y verdes indicaron al público cuando encender sus equipos. La obra busca reflejar el equilibrio que supuestamente existe entre el orden y el caos. De acuerdo a las reglas del juego, el público bajaba o subía el volumen de los celulares para interactuar con la orquesta. Es una gran aventura, dijo a Los Ángeles Times el director de la orquesta, Paul Freeman.
¿Qué no es posible hacer con una computadora-teléfono portátil, capaz de recibir videos y controlar los sistemas digitales de la casa mediante conexión por satélite? La pregunta es para que, por quien, a que costo. Nielsen no dijo cuantos de los ricos norteamericanos utilizan estos "gadgets" sofisticados. En todo caso, se trata de una nuevas generación de ciudadanos que no tiene nada que ver con el resto de las estadísticas.
Aunque es necesario revaluar las transformaciones de carácter tecnológico y sus consecuencias para la ciencia y la economía, estos grandes cambios traen oportunidades inéditas para todos los países, pero sólo si desarrollan adecuadas políticas de educación y formación de profesionales y especialistas, como ha hecho Cuba con los Joven Clubes de Computación, los tecnológicos de esta materia y la Universidad de Ciencias Informáticas, que cuenta ya con 10.000 estudiantes en cursos de seis años.
La tecnología no es hostil, sólo hay que saber asumirla, a la par que se utilizan todos los medios hábiles para el desarrollo del saber y la cultura. En este sentido podemos decir con el famoso escritor brasileño, Paulo Coelho, que nuevos horizontes se abren para el conocimiento a través de Internet, a la vez que la pantalla de la computadora es incapaz de sustituir la magia del libro. Estas tecnologías, dice, obligan a todo el mundo a aprender a leer y escribir. Estamos en un momento parecido al de los grandes navegantes del Siglo XV. Nuestro potencial es infinito, expreso a la publicación española "El Periodista Digital"

9 oct 2006

CRISTOBAL COLON Y SUS ENIGMAS

El ultimo viaje del misterioso y polémico Almirante

Recientemente se presentó un libro periodístico "El último viaje de Cristóbal Colón", con el mapa de ruta del colonizador que vuelve, además, sobre la polémica en torno al lugar donde descansan sus restos y al lugar donde nació. Este es el año en que se conmemora el quinto centenario de su muerte y un nuevo aniversario de su viaje a las tierras de que lo obsesionaron.

Desde los primeros meses de este año tanto la Republica Dominicana y España aseguran ser los depositarios de los restos del colonizador, cuyos supuestos restos están siendo analizados junto a las de su hermano Diego y de su hijo Hernando. "Los resultados parciales de los análisis publicados en noviembre de 2004 demostraron que el ADN materno coincide en los restos de Cristóbal y Diego", dijo la historiadora Anunciada Colón de Carvajal, descendiente del descubridor, durante la presentación del libro. Esta ceremonia se realizó en España y durante este mes el texto estará en los anaqueles de nuestras librerías.
Al mismo tiempo, recordó la historiadora que ya se conocieron los resultados de dos laboratorios de los cinco donde se están llevando a cabo los análisis (Granada, Santiago de Compostela, Texas, Roma y Leipzig). El análisis de los restos de Colón también podrían terminar con otra polémica: su origen.
Aunque para la familia no parece haber demasiadas dudas sobre su origen genovés, hay quienes aseguran que había nacido en Mallorca, Barcelona, Portugal y también hay quienes lo consideran judío. "Hernando Colón dice en su testamento que su padre era genovés", dijo la descendiente del Descubridor durante la presentación del libro de los periodistas alemanes Klaus Brinkbaumer y Clemens Hoges. Y también recordó que según un testimonio del Siglo XVIII, "un descendiente del almirante se va al Piamonte a ver a sus familiares." El 20 de mayo pasadose cumplieron quinientos años de la muerte de Cristóbal Colón.
Hoy como ayer, la vida y la muerte del Almirante, están rodeadas de misterios que ninguna ciencia parece aclarar. Algunos investigadores inscribieron a Colón en la familia Colombo, luego se supo que el apellido original era Collone.
Se sabe que en 1462 el navegante usó o

3 oct 2006

EL ARGENTINISMO EN LAS HISTORIETAS

Un imperio de papel y tinta china

Fue un 4 de setiembre, pero en 1957, que llegaba a los kioscos Hora Cero Semanal, una revista que marcó una breve edad dorada para la historieta argentina. A través de la textura de sus paginas, aún reconocibles en el recuerdo, se forjó el imaginario de una generación de "argentinitos".
Como enunció André Malraux (según la introducción de "Las ciudades"), Buenos Aires es "la capital de un imperio imaginario", es decir de un país que dio al mundo las historietas más memorables.
Aparte de esta intruducción a una serie de novedades, publicamos, dos trabajos debidos a la pluma de Rosa Raydán y de Víctor García Costa. En el primero de estos textos estudiaremos un perfil revolucionario de Mafalda de Quino y sus 43 años de vida. En el segúndo se repasará la historia –compleja y muy argentina- del indio Patoruzú, la polémica y siempre exitosa creación de Dante Quinterno.

DATOS BIBLIOGRAFICOS SOBRE
LAS HISTORIA DE LA HISTORIETA ARGENTINA


Nuevas reediciones de reediciones, de estas formas literarias de papel y tinta china, vuelven a los quioscos y librerias. Algunos grupos de entusiastas del genero han comenzado a trabajar, en varias capitales de provincias, por lograr que durante este mes se retome el habito de la historieta como placer de lectura.
Toman como referencia la fecha y el mes por las páginas de Hora Cero Semanal. Aquella mítica publicación apareció por estas fechas anuales y al frecuentar las viejas ediciones se pueden encontrar excelentes trabajos de imaginación. Algunos con guiones de Héctor G. Oesterheld y otros importantes escritores del género. También los chicos de aquella época –muchos de nosotros-, pudieron vivir un lejano oeste (que se suponía parecido a nuestro campo) junto a Randall the Killer (con dibujos de Arturo del Castillo). Allí descubrimos las amargas historias de guerra de Ernie Pike (dibujadas por Hugo Pratt) y otros se vieron envueltos en una aventura como no habían visto nunca, en parte bélica, en parte ciencia-ficción y que ocurría a la vuelta de la esquina. El título de esa historieta -que dibujaba con lujo de detalles Francisco Solano López- era El Eternauta. Hoy ese ícono de la cultura popular de nuestro país cuenta con constantes reediciones. Esto demuestra, como es razonable pensar, que su influencia en la imaginación de los argentinos aún no ha cesado.

Una historia de edición nacional.
Pero este no es el único ejemplo, la historia se remonta más atrás en el tiempo. Así lo presenta, por ejemplo, el libro La historieta argentina: una historia de Judith Gociol y Diego Rosemberg con prólogo de Pablo De Santis. El mismo fue editado en Buenos Aires por Ediciones de la Flor. Este hermoso libro —dice uno de sus comentaristas— es una de las contribuciones más valiosas que se han realizado en el país sobre nuestra historieta está dividido en dos partes bien diferenciadas: "Cronologías" y "Genealogías".
"Cronologías", cuya extensión es de sólo cuarenta y una páginas, condensa la historia de los cuadritos nacionales con precisión y síntesis, y sirve de marco de referencia para que el lector acuda a ella en cualquier momento. Se divide en nueve décadas (del 10 al 90) y parte del nacimiento bastardo del comic: el Yellow Kid (1893), de Outcault. Un aporte enriquecedor lo constituyen las constantes alusiones a historietas, dibujantes y guionistas de otras nacionalidades, de manera que esta obra también contiene en su interior una suerte de compendio de la historieta universal.
Las "Genealogías" son veinte y responden, para Gociol y Rosemberg, a "una clasificación —también arbitraria y discutible— que permite hacer conexiones a lo largo del tiempo". Como señala Pablo De Santis en su brillante prólogo, aquí "El personaje aparece antes que el guionista, el dibujante o las peripecias editoriales". Esta parte es la más vital y creativa del libro, pues se puede empezar por un tema como "Los cowboys" y seguir con "Las mujeres" o "Los sicarios", como si se estuviera consultando un diccionario.
Una dificultad crítica es reseñar estas "Genealogías", pues son tan apasionantes que habría que reproducir la mayor parte del ensayo. Así, en "Los animales" nos encontramos con el humor de Clemente y de Diógenes y el linyera, y desde allí podemos saltar a "Las ciudades" y las audaces y misteriosas geometrías de Parque Chas. O del desopilante Cazador en "Los héroes y superhéroes" a un atormentado y solitario Alack Sinner en "Los detectives". En el "Índice Onomástico", que se incluye al final del libro, se mencionan a más de setecientos personajes.
Otro de los méritos que deben señalarse es la excelencia del abundante material gráfico que ofrece La historieta argentina y los acertados comentarios que se vierten sobre los rasgos estilísticos de los dibujantes. Los autores han concretado un estupendo y concienzudo trabajo de investigación, apuntalado por las numerosas citas y los valiosos testimonios que acompañan al texto.
Este libro depara un auténtico placer visual y una rotunda emoción nostálgica, y puede leerse con el mismo placer con que se leían aquellos famosos Libro de Oro de Patoruzú o los emblemáticos El Libro de Fierro.

¿Tendremos un Día de la Historieta Argentina?
Pero no todo pasa por el papel impreso. Hace aproximadamente un año atrás un grupo de amigos de Argentina tuvo la idea de elegir un día para celebrar, homenajear y compartir el arte que más disfrutaban: la historieta. Enseguida formaron la Comisión Pro Día de la Historieta (C.P.D.H.) cuya misión era encontrar la fecha significativa en que se celebraría el Día de la Historieta.
Encontramos que Celebrar el Día de la Historieta significará –como ellos dicen- tratar de invocar ese momento dorado de creación y de pasión. "A partir de este año, cada 4 de septiembre será el día ideal para regalar historietas (todo tipo de historietas), paraadornar comiquerías y kioscos, para buscar con nuestra imaginación nuevas formas de un arte que nos gusta disfrutar y también compartir."La Comisión Pro Día de la Historieta (C.P.D.H.) –que se reunió en distintas comiquerías de la Capital- es un grupo de amigos que siente pasión por el Noveno Arte, dentro del cual hay periodistas, educadores, artistas, editores, comerciantes, pero sobre todo lectores. Su finalidad es concretar para setiembre del año que viene el Día de la Historieta. La idea es comenzar con un festejo anual que pueda volverse tradición y una posibilidad real de rescatar nuestros valores en ese género narrativo de creatividad y tinta china. Para ello trabajaron durante todo el mes que culmina, como decimos, para hacer posible una ilusión y un homenaje. (Juan Bazán)

MAFALDA CUMPLIÓ 42 AÑOS
Una revolucionaria más allá del lápiz y el papel
Por Rosa Raydán

Este 29 de septiembre cumplió 42 años una de las revolucionarias más encantadoras y famosas del mundo: Mafalda. Nacida en la efervescencia de los años 60, Mafalda es una creación del caricaturista argentino Joaquín Lavado, conocido en todo el mundo como Quino. Según opinan los expertos, con Mafalda, el género de la historieta pasó de lo social a lo psicológico.

Según relata el sitio www.clubcultura.com, cuando comenzó a dibujarse, Mafalda tenía seis años y en marzo siguiente ingresó al jardín de infantes. En los 10 años de la historia, aparentemente llegó hasta el tercero o cuarto grado.
Inicialmente, fue creada como imagen de una campaña publicitaria de electrodomésticos. Sin embargo, la fuerza del personaje condujo a Quino a seguirla dibujando. Su debut fue el 29 de septiembre de 1964 en Gregorio, un suplemento de humor.
Más tarde, Mafalda, sus padres, su clan de amiguitos y su tortuga Burocracia, se mudaron al periódico argentino Primera Plana. En 1965, la tira cambió nuevamente de domicilio y se estableció en el diario El Mundo hasta que éste cerró dos años después.
Esta mudanza se llevó a cabo cuando la mamá de Mafalda estaba embarazada de Guille. La historieta llegó a la revista Siete Días en 1968, con el bebé ya nacido. El 25 de junio de 1973, Quino dejó de dibujar las tiras de Mafalda.

Mafalda, la revolucionaria
Mafalda vivió momentos difíciles durante la dictadura militar argentina. En el 42 aniversario de la caricatura, Quino declaró que uno de los problemas que más sufrió durante su carrera como dibujante fue ese período de censura.
La situación le obligó a buscar maneras alternas para esquivar ese control. Muestra de ello es el caso de la aversión de Mafalda hacia la sopa, la cual, según el dibujante, era una metáfora del autoritarismo militar de derecha que vivía el país sureño, según señala el diario español El Mundo.
Desde el momento de su publicación, Mafalda se ganó la fama de ser un registro minucioso de la clase media argentina de los años 60 y de los episodios que resaltaban en el escenario mundial para el momento.
Sus amigos, Manolito, Felipe, Susanita, Libertad, e incluso su tortuga, Burocracia, fueron guiños hacia los estereotipos de Argentina y del mundo en el momento, retratando diferentes aspectos del género humano.
Mafalda retrató y opinó sobre eventos tales como la guerra de Vietnam, la carrera espacial, el movimiento tercermundista, el asesinato de Kennedy, los derechos humanos, el sexo, la represión, el psicoanálisis, el feminismo y la religión, entre otros muchos.
En ese sentido, uno de los juguetes preferidos de Mafalda era un globo terráqueo, al cual cuidaba como a un enfermo, lo abrigaba y hasta intentó mejorarlo con las cremas de belleza de su madre.
Una de sus frases célebres señala: "El mundo está malo, le duele el Asia".
Compartió su época con personajes tan diversos y célebres como el Che Guevara, Martin Luther King, U-Thant, Juan XXIII y Los Beatles, de quienes era fanática.
En su carta de presentación al dueño del semanario argentino Siete Días, la propia Mafalda comentó: "Los Beatles me gustan por que son muy alegres, están de acuerdo conmigo en muchas cosas, y tocan la música que nos gusta. Ellos deberían ser presidentes del mundo, porque tienen influencia sobre mucha gente de todos los países".
En esa misma carta, Mafalda dijo: "Sobre la paz tengo todos los días pruebas de que, por ahora, es un cuento. Aprovecho la publicación de esta cartita para enviar un saludo a U-Thant. El pobre secretario de la ONU tiene muy buenas intenciones y sería macanudo que le hicieran caso, pero... Pensando en él, comprendo mejor a papá y a mamá".
Tal fue la fama de Mafalda, que el famoso escritor rioplatense Julio Cortázar, al preguntársele sobre la tira cómica, dijo: "No tiene importancia lo que yo pienso de Mafalda. Lo importante es lo que Mafalda piensa de mí".
Por su parte, el escritor y filósofo italiano Humberto Eco comentó en cierta oportunidad: "Puesto que nuestros hijos se preparan para ser, por elección nuestra, una multitud de Mafaldas, no será imprudente tratar a Mafalda con el respeto que merece un personaje real". Asimismo, el Nobel de literatura colombiano, Gabriel García Márquez, aseguró años atrás: "Después de leer a Mafalda me di cuenta de que lo que te aproxima más a la felicidad es la quinoterapia".

Mafalda a los 40
Para 1973, la época en que finalizaba la historieta, el Canal 11 de Buenos Aires comenzó a transmitir una serie de cortos animados, producidos por Daniel Mallo, donde los personajes de Quino dialogaban.
Esto dio origen, posteriormente, a la película de Mafalda, la cual fue realizada en el año 1979 y estrenada en Argentina en el año 1981. El largometraje fue producido nuevamente por Daniel Mallo.
Se trataba de un montaje de los cortos hechos para la televisión, duraba 75 minutos, y en el año 1982 se estrenó en España con el nombre de El mundo de Mafalda.
Esos mismos dibujos animados, en el año 1985, son doblados al francés, y se transmiten en Francia, Bélgica, Luxemburgo y Canadá. Así lo informa el site www.todohistorietas.com.
Más recientemente, con el auge de los juegos de video, Mafalda es protagonista de un juego para PCs. Se trata de Mafalda Juegos Interactivos, un CD multimedia con software educativo para niños de 4 a 7 años.
El programa brinda una docena de entretenimientos que van desde los recreos mnemotécnicos hasta la identificación de letras y números con dos o tres niveles de dificultad.
Las tiras de Mafalda han sido traducida a más de 20 idiomas, y existen aproximadamente 10 libros con recopilaciones sobre sus tiras, las cuales se conocen en países de habla no hispana como Finlandia, Alemania, Portugal, Grecia, Holanda, Dinamarca, Noruega y Taiwán.
Según refirió la agencia AFP, para el 40 aniversario de la caricatura, se preparó una mega exposición en Palacio de Hielo de Buenos Aires. En ella, se mostró la trayectoria de Quino como caricaturista, la cual data de más de medio siglo.
Quino, quien reside en Madrid, España, se ha declarado en múltiples ocasiones sorprendido por la repercusión que han tenido sus dibujos en países tan diferentes a su país natal como Japón o Estados Unidos.
"Las tiras de Mafalda están sembradas de tópicos argentinos, y siempre me he preguntado cómo pueden entenderlas en otras culturas", aseguró Quino al diario El Mundo, de España.
Lo cierto es que con el paso del tiempo, esta historieta protagonizada por una niña rebelde y tierna, junto a su singular grupo de amigos, se ha convertido en objeto de culto, no sólo en su país natal sino en muchos países alrededor del planeta.
Por su parte, Mafalda, quien más de una vez dijo: "Paren al mundo, que me quiero bajar", dejó las historietas, con la promesa de tomar cartas en el asunto de las guerras.
"Cuando sea grande voy a ser traductora de la ONU. Pero cuando los embajadores se peleen voy a traducir todo lo contrario, para que se entiendan mejor y haya paz de una buena vez"

LA "GRAN HISTORIETA" DEL ARGENTINISMO
Para una nueva lectura de Patoruzú
Por Víctor O. García Costa

Cuando leí, en el número 226 de La Palabra de Ezeiza, un trabajo de Ana Currá titulado Patoruzú y el argentinismo, recordé que, por entonces hacía 5 años, en junio de 1994, la Revista Todo es Historia, que dirige Félix Luna, había publicado otro interesante trabajo de Ernesto Quiroga Micheo titulado Patoruzú, la historieta que ya es historia, dedicado, también, a esa antigua creación de Dante Raúl Quinterno con la que miles y miles de niños argentinos -y no tan niños- durante más de 60 años nos habíamos deleitado y, en alguna medida, formado -o deformado- nuestras ideas en torno de la vida y destino de los pueblos indígenas que habitaban estas tierras antes de la llegada de los conquistadores españoles y de los posteriores malones inversos de la llamada "Conquista del Desierto", personalizados en los descendientes de Patoruzec que, para mayor confusión de los pequeños lectores, nada tenía de argentino porque era de origen egipcio. Formulé entonces algunas observaciones que Todo es Historia publicó en el número siguiente y que cobraban actualidad ante el trabajo de Ana Currá.

Quién de nosotros -niños por entonces- no esperaba ansiosamente la salida de aquella publicación apaisada a la que llamabamos "el" Patoruzú y, más tarde, de esa otra denominada por nosotros "el" Patoruzito, cuyas aventuras, muchas veces -por falta de "chirolas"-, leíamos con avidez gracias a la generosidad del "diariero de la esquina" que nos las prestaba con el compromiso de devolverla "sin mancharla y sin doblarla" y que disfrutábamos con la siempre oportuna llegada salvadora de Patoruzú montado en el resoplante Pampero.
Pero los años desalojaron la ingenua simpleza del niño y la reemplazaron con la madurez del análisis, que normalmente trastoca la pasada felicidad infantil, seguramente como confirmación de aquél: "si quieres ser feliz, como me dices, no analices amigo... no analices".
En su trabajo, Quiroga Micheo señalaba algunas de las críticas que recibió el personaje, entre ellas las que le atribuyeron actitudes de racismo contra judíos y gitanos. Sin embargo en ese trabajo y después en el de Ana Currá se había pasado por alto lo que, a mi juicio, constituye el aspecto crítico fundamental de la historieta y de su personaje central.
Hacia junio de 1977, seguramente por razones económicas, los editores decretaron la desaparición de Patoruzú, hecho del que se ocuparon algunas revistas y periódicos.
Escribí entonces una nota titulada ( Huija!, que apareció en La Vanguardia (azul) editada clandestinamente durante la última dictadura militar, invitando a hacer una nueva lectura del Patoruzú. Señalé allí que el personaje, Patoruzú, había tenido una suerte extraña y muy distinta de la de sus hermanos de raza.
En tanto éstos habían sido arrojados de sus tierras, a pesar de haber desarrollado una lucha sin cuartel para defenderlas, Patoruzú había conseguido retenerlas y era dueño de miles de hectáreas. En tanto aquéllos habían muerto por millares, víctimas del plomo de la "civilización" ávida de tierras y ganancias, masacrados sin protesta apostólica, Patoruzú había sobrevivido y moriría más de 100 años después por un simple decreto de la empresa editorial. En tanto sus hermanos de raza seguían reclamando las tierras usurpadas -aún lo siguen haciendo- Patoruzú no sólo las poseía sino que, al uso y costumbre de nuestros grandes terratenientes, no vivía en su tierra sino que habitaba en un lujoso hotel, dueño de una fortuna incalculable.
Para colmo de males, un misógino Patoruzú no sólo convivía en la historieta, alegre y simbólicamente, con el coronel Cañones, conspicuo representante de quienes, en procura de aquella "civilización", habían avanzado sobre sus tierras masacrando a su pueblo con las armas, sino que protegía al sobrino del coronel, Isidoro Cañones, un mujeriego -cuestión en lo que podría ser perdonado-, jugador, tramposo, borracho y pendenciero que era el "ejemplo" para Upa, su hermano retrasado y panzón.
La invocación a José Hernández que hacía Currá omitía que en el Martín Fierro Hernández refleja el enfrentamiento del gaucho con el indio, al que llama "salvaje" e "infiel". Por sus ancestros egipcios, Patoruzú no fue de raza indígena. Y mucho menos fue gaucho. En rigor de verdad, no es arquetipo de argentinidad.
Nada de lo dicho resta al reconocimiento de las cualidades artísticas de su creador plasmadas a lo largo de extensa jornada, lo que ha merecido diversos homenajes, entre los que está la emisión de sellos postales conmemorativos y que, sin duda, darán lugar a nuevos reconocimientos cuando el 28 de octubre de 2008 se cumplan los 100 años de su nacimiento.
Se dirá que Patoruzú fue sólo una historieta pero, como "historieta" deriva de "historia", creemos que valía la pena, al menos, sumar al generoso reparto de "patacones" al que era proclive Patoruzú, alguna suerte de reivindicación para la raza indígena, sometida y usurpada.