30 jun 2010

NUEVO PERIODISMO EN WIKILEAK – EN AGORA 21


"Nosotros nos proponemos que todo gobierno autoritario, toda institución opresiva y todo gobierno corrupto sea objeto de presión, y no sólo a través de la diplomacia internacional y de la libertad de información, o de las elecciones cada cuatro años, sino también a través de algo más poderoso: la propia conciencia individual de la gente que forma parte de ellos".
¿Cómo se intentaría esto? Simplemente a través de un sitio web denominado Wikileaks. Ante semejante afirmación, dada la expresión inobjetable del encomillado precedente, uno necesariamente se pregunta sobre si se trata de un mecanismo "revolucionario" del sistema de información o de un sistema político implementado a través de los canales informatizados por donde fluye ahora la información. ¿Podremos sacar algo en limpio?
Los enunciados expuestos por el nuevo sitio indican sus intenciones: Sus principios se basan en la idea de dejar trascender y llegar al conocimiento público todas aquellas informaciones que la prensa en connivencia con los estratos del poder y del dinero ocultan o enmascaran proporcionando a las comunidades la oportunidad no solo de conocer la otra cara de la verdad sino la de posibilitar también a los investigadores el acceso a fuentes de información no tradicionales ni oficialmente comprometidas.




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Susana Merino, escribió sobre el tema en ISLANDIA REVOLUCIONA LA PRENSA, y en ese texto nos recuerda que:
"Islandia un casi olvidado país alojado en una isla solitaria, próxima al Artico, sembrada de volcanes y de glaciares, ha sido durante estos últimos meses noticia obligada en muchos diarios del mundo. Primero fue la crisis bancaria que movilizó a su población y obtuvo de su gobierno la decisión de realizar un referendo destinado a decidir si el Estado debía o no acudir a solventar el default de sus bancos con los impuestos de los ciudadanos. En dicha ocasión los gobiernos británico y holandés, luego de resarcir inconsulta y unilateralmente a los clientes locales de los bancos islandeses estaban requiriendo a Islandia el subsiguiente reembolso. El pueblo de Islandia dijo masivamente: NO.
Luego la erupción del volcán Eyjafjalla que cubrió con un manto de cenizas la atmósfera del Atlántico Norte y de varios países del occidente europeo y obligó a cancelar miles de vuelos aéreos durante un período de tiempo que obligó a mantener el nombre de Islandia en los titulares de los diarios.
Y últimamente una noticia poco menos que revolucionaria: Islandia se ha declarado "puerto franco" para la libertad de información, una propuesta de Wikileaks que fue aprobada por unanimidad por el parlamento islandés.
Veamos qué es Wikileaks: Entre las declaraciones de su página web (www.wikileaks.org) puede leerse: "Nosotros nos proponemos que todo gobierno autoritario, toda institución opresiva y todo gobierno corrupto sea objeto de presión, y no sólo a través de la diplomacia internacional y de la libertad de información, o de las elecciones cada cuatro años, sino también a través de algo más poderoso: la propia conciencia individual de la gente que forma parte de ellos". Sus principios se basan en la idea de dejar trascender y llegar al conocimiento público todas aquellas informaciones que la prensa en connivencia con los estratos del poder y del dinero ocultan o enmascaran proporcionando a las comunidades la oportunidad no solo de conocer la otra cara de la verdad sino la de posibilitar también a los investigadores el acceso a fuentes de información no tradicionales ni oficialmente comprometidas.
Su creador es el hacker australiano Julian Assange buscado para ser detenido por el gobierno de los EEUU bajo la acusación de haber divulgado materiales militares clasificados. Sin embargo últimamente Assange, por algún tiempo, transitoria y voluntariamente desaparecido ha desafiado esa amenaza y se ha presentado ante el Parlamento europeo en Bruselas donde se discutía un convenio sobre la censura, de algún modo relacionado con la reciente "ley mordaza" propiciada por Berlusconi.
El material que desató la ira del ejército usamericano es un video que puede verse en http://www.rnw.nl/espanol/article/eeuu-ej%C3%A9rcito-en-problemas-a-causa-de-wikileaks y que muestra claramente un bombardeo desde un helicóptero estadounidense de ciudadanos indefensos en la ciudad de Bagdad. Dicho documento lo habría filtrado un soldado actualmente bajo arresto pero sobre cuya culpabilidad existen dudas y la negativa explícita del propio Assange.
El funcionamiento de Wikileaks es similar al de Wikipedia en el sentido de que es de libre acceso y que la publicación de contenidos falsos puede ser revocada por otros usuarios. Y así como Wikipedia ha demostrado que una comunidad bien informada puede aportar importantes conocimientos con precisión, claridad y transparencia, Wikileaks aspira a convertirse en un transmisor rápido y veraz de documentos e informaciones que generalmente omiten publicar los medios tradicionales.
La iniciativa islandesa también llamada Moderna Iniciativa Mediática "podría constituir el catalizador de una necesaria reforma legislativa sobre la libertad de información a nivel global" manifiesta el sitio Index en Censorship o como expresa la parlamentaria europea y ex magistrada Eva Joly, "la iniciativa estimula la integridad y la transparencia por parte de los gobiernos" de modo que Islandia podría convertirse en un disparador de nuevas actividades mediáticas internacionales de todo tipo respaldadas por una absoluta libertad de información y de investigación y en un área en la que la protección de los informantes y de los periodistas se halle garantizada. Islandia en suma, un pequeño y lejano país que al margen de su impredecible actividad volcánica está dando pasos concretos y demostrando con sus convicciones y sus hechos que "Otro mundo es posible".
By SUSANA MERINO - Buenos Aires, JUNIO 2010.

24 jun 2010

ERIC HOBSBAWM - HISTORIADOR - EN AGORA 21

Esta es una entrevista a Eric Hobsbawm.

El historiador habla, en la misma, de las mutaciones incesantes de un mundo sin sosiego.
Hobsbawm es un reconocido historiador inglés, autor de clásicos ineludibles sobre el siglo XX, que aquí examina la crisis actual y los vertiginosos cambios de las últimas décadas en la política global, y retrata el horizonte por venir. Es probablemente -dicen quienes se refieren a Hobsbawm-, que se trate del mayor historiador vivo. Su mirada es universal, como lo muestran sus libros La era de la revolución y La era del capitalismo. Esta entrevista constituye su más reciente ejercicio de una visión global sobre los problemas y las tendencias del mundo moderno.
Aqui en "Eric Hobsbawm - Historiador - en Agora 21", nos permitimos descubrir la amplia y diversa obra del estudioso a quién su pares lo sitúan entre las autores más destacados, leídos y reconocidos de nuestro tiempo. Dedicado al estudio de la historia económica y social y a problemas más generales de la historia, sus trabajos se han convertido en obligada referencia de gran número de investigaciones y debates. Sus originales planteamientos han dado lugar a nuevas líneas de trabajo y fructíferas controversias.
Hobsbawm es británico, aunque nació en 1917 en Alejandría, cuando Egipto formaba parte del imperio británico.
Esta entrevista fue publicada en primer termino por IADEG (Instituto Argentino de Estudios Geopolíticos) E 306 18-06-2010
Fuente: New Left Review - Mayo 2010 - A la entrevista la recibimos a través del amigo A. Sicardi: asicardi@ecupres.com.ar, a quién agradecemos. Consideramos que estamos ante un material para ser leido y reflexionado adecuadamente, especialmente en el hoy y ahora, tan complejo e inusual, que está viviendo esto que llamamos "el mundo".






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PREGUNTAS Y RESPUESTA DE ERIC HOBSBAWM


Su obra Historia del siglo XX concluye en 1991 con una visión sobre el colapso de la esperanza de una Edad de Oro para el mundo. ¿Cuáles son los principales cambios que registra desde entonces en la historia mundial?

Veo cinco grandes cambios. Primero, el desplazamiento del centro económico del mundo del Atlántico norte al sur y al este de Asia. Este proceso comenzó en los años 70 y 80 en Japón, pero el auge de China desde los 90 ha marcado la diferencia. El segundo es, desde luego, la crisis mundial del capitalismo, que nosotros predijimos siempre pero que tardó mucho tiempo en llegar. Tercero, el clamoroso fracaso de la tentativa de Estados Unidos de mantener en solitario una hegemonía mundial después de 2001, un fracaso que se manifestó con mucha claridad. Cuarto, cuando escribí Historia del siglo XX no se había producido la aparición como entidad política de un nuevo bloque de países en desarrollo, los BRIC (Brasil, Rusia, India y China). Y quinto, la erosión y el debilitamiento sistemático de la autoridad de los Estados: de los Estados nacionales dentro de sus territorios y, en muchas partes del mundo, de cualquier clase de autoridad estatal efectiva. Acaso fuera previsible pero se aceleró hasta un punto inesperado.

¿Qué más le ha sorprendido?
Nunca dejo de sorprenderme ante la absoluta locura del proyecto neoconservador, que no sólo pretendía que el futuro era Estados Unidos, sino que incluso creyó haber formulado una estrategia y una táctica para alcanzar ese objetivo. Hasta donde alcanzo a ver, no tuvieron una estrategia coherente.

¿Puede prever alguna recomposición política de lo que fue la clase obrera?
No en la forma tradicional. Marx estaba sin duda en lo cierto al predecir la formación de grandes partidos de clase en una determinada etapa de la industrialización. Pero estos partidos, si tenían éxito, no funcionaban como partidos exclusivos de la clase obrera: si querían extenderse más allá de una clase reducida, lo hacían como partidos populares, estructurados alrededor de una organización inventada por y para los objetivos de la clase obrera. Incluso así, había límites para la conciencia de clase. En Gran Bretaña el Partido Laborista nunca obtuvo más del 50 por ciento de los votos. Lo mismo sucede en Italia, donde el PCI era todavía más un partido popular.
En Francia, la izquierda se basaba en una clase obrera débil pero políticamente fortalecida por la gran tradición revolucionaria, de la que se las arregló para convertirse en imprescindible sucesora, lo cual les proporcionó a ella y a la izquierda mucha más influencia. El declive de la clase obrera manual parece algo definitivo. Hay o habrá mucha gente que quede realizando trabajo manual, pero no puede seguir siendo el principal fundamento de esperanza: carece del potencial organizativo de la vieja clase obrera y no tiene potencial político. Ha habido otros tres importantes desarrollos negativos.
El primero es, desde luego, la xenofobia, que para la mayoría de la clase obrera es, como dijo el alemán August Bebel, el "socialismo de los tontos": salvaguardar mi trabajo contra gente que compite conmigo. Cuanto más débil es el movimiento obrero, más atractiva es la xenofobia. En segundo lugar, gran parte del trabajo y del trabajo manual que la administración pública británica solía llamar "categorías menores y de manipulación", no es permanente sino temporario; por ejemplo, estudiantes o emigrantes trabajando en catering. Eso hace que no sea fácil considerarlo como potencial organizable. La única forma fácilmente organizable de esa clase de trabajo es la que está empleada por autoridades públicas, razón por la cual estas autoridades son vulnerables.
El tercero y el más importante de estos cambios es la creciente ruptura producida por un nuevo criterio de clase, en concreto, aprobar exámenes en colegios y universidades como un billete de acceso para el empleo. Esto puedes llamarlo meritocracia pero está institucionalizada y mediatizada por los sistemas educativos. Lo que ha hecho es desviar la conciencia de clase desde la oposición a los empleadores a la oposición a juniors de una u otra clase, intelectuales, élites liberales o aventureros. Estados Unidos es un típico ejemplo, pero, si miras a la prensa británica, verás que no está ausente en el Reino Unido. El hecho de que, cada vez más, obtener un doctorado o al menos ser un posgraduado también te da una oportunidad mejor para conseguir millones complica la situación.

¿Puede haber nuevos agentes?
Ya no en términos de una sola clase pero entonces, desde mi punto de vista, nunca lo pudo ser. Hay una política de coaliciones progresista, incluso de alianzas permanentes como las de, por ejemplo, la clase media que lee The Guardian y los intelectuales, la gente con niveles educativos altos, que en todo el mundo tiende a estar más a la izquierda que los otros, y la masa de pobres e ignorantes. Ambos grupos son esenciales pero quizá sean más difíciles de unificar que antes. Los pobres pueden identificarse con multimillonarios, como en Estados Unidos, diciendo "si tuviera suerte podría convertirme en una estrella pop". Pero no puede decir "si tuviera suerte ganaría el premio Nobel". Esto es un problema para coordinar las políticas de personas que objetivamente podrían estar en el mismo bando.

¿En qué se diferencia la crisis actual de la de 1929?
La Gran Depresión no empezó con los bancos; no colapsaron hasta dos años después. Por el contrario, el mercado de valores desencadenó una crisis de la producción con un desempleo mucho más elevado y un declive productivo mayor del que se había conocido nunca. La actual depresión tuvo una incubación mayor que la de 1929, que llegó casi de la nada. Desde muy temprano debía haber estado claro que el fundamentalismo neoliberal producía una enorme inestabilidad en el funcionamiento del capitalismo. Hasta 2008 parecía afectar sólo a áreas marginales: América Latina en los años 90 hasta la siguiente década, el sudeste asiático y Rusia. En los países más importantes, todo lo que significaba eran colapsos ocasionales del mercado de valores de los que se recuperaban con bastante rapidez.
Me pareció que la verdadera señal de que algo malo estaba pasando debería haber sido el colapso de Long-Term Capital Management (LTCM) en 1998, que demostraba lo incorrecto que era todo el modelo de crecimiento, pero no se consideró así. Paradójicamente, llevó a un cierto número de hombres de negocios y de periodistas a redescubrir a Karl Marx, como alguien que había escrito algo de interés sobre una economía moderna y globalizada; no tenía nada que ver con la antigua izquierda: la economía mundial en 1929 no era tan global como la actual. Esto tuvo alguna consecuencia; por ejemplo, hubiera sido mucho más fácil para la gente que perdió su trabajo regresar a sus pueblos. En 1929, en gran parte del mundo fuera de Europa y América del Norte, los sectores globales de la economía eran áreas que en gran medida no afectaron a lo que las rodeaba.
La existencia de la URSS no tuvo efectos prácticos sobre la Gran Depresión pero sí un enorme efecto ideológico: había una alternativa. Desde los 90 asistimos al auge de China y las economías emergentes, que realmente ha tenido un efecto práctico sobre la actual depresión pues ayudó a mantener una estabilidad mucho mayor de la economía mundial de la que hubiera alcanzado de otro modo. De hecho, incluso en los días en que el neoliberalismo afirmaba que la economía prosperaba de modo exuberante, el crecimiento real se estaba produciendo en su mayoría en estas economías recién desarrolladas, en especial China.
Estoy seguro de que si China no hubiera estado ahí, la crisis de 2008 hubiera sido mucho más grave. Por esas razones, vamos a salir de ella con más rapidez, aunque algunos países seguirán en crisis durante bastante tiempo.

¿Qué pasa con las consecuencias políticas?
La depresión de 1929 condujo a un giro abrumador a la derecha, con la gran excepción de América del Norte, incluido México, y de los países escandinavos. En Francia, el Frente Popular de 1935 solo tuvo el 0,5 por ciento más de votos que en 1932, así que su victoria marcó un cambio en la composición de las alianzas políticas en vez de algo más profundo. En España, a pesar de la situación cuasirrevolucionaria o potencialmente revolucionaria, el efecto inmediato fue también un movimiento hacia la derecha, y desde luego ése fue el efecto a largo plazo. En la mayoría de los otros Estados, en especial en el centro y este de Europa, la política se movió claramente hacia la derecha. El efecto de la actual crisis no está tan definido. Uno puede imaginarse que los principales cambios o giros en la política no se producirán en Estados Unidos u occidente, sino casi seguro en China.

¿Cree que China continuará resistiendo la recesión?
No hay ninguna razón especial para pensar que de repente dejará de crecer. El gobierno chino se ha llevado un buen susto con la depresión, porque ésta obligó a una enorme cantidad de empresas a detener temporalmente su actividad. Pero el país todavía está en las primeras etapas del desarrollo económico y hay muchísimo espacio para la expansión. No quiero especular sobre el futuro, pero podemos imaginarnos a China dentro de veinte o treinta años siendo a escala mundial mucho más importante que hoy, por lo menos económica y políticamente, no necesariamente en términos militares. Desde luego, tiene problemas enormes y siempre hay gente que se pregunta si el país puede mantenerse unido, pero yo creo que tanto la realidad del país como las razones ideológicas continúan militando poderosamente para que la gente desee que China permanezca unida.

Pasado un año, ¿cómo valora la administración Obama?
La gente estaba tan encantada de que hubiera ganado alguien con su perfil, y en medio de la crisis, que muchos pensaron que estaba destinado a ser un gran reformista, a la altura de que hizo el presidente Franklin Roosevelt. Pero no lo estaba. Empezó mal. Si comparamos los primeros cien días de Roosevelt con los de Obama, lo que destaca es la predisposición de Roosevelt a apoyarse en consejeros no oficiales para intentar algo nuevo, comparado con la insistencia de Obama en permanecer en el mismo centro. Desperdició la ocasión. Su verdadera oportunidad estuvo en los tres primeros meses, cuando el otro bando estaba desmoralizado y no podía reagruparse en el Congreso. No la aprovechó. Podemos desearle suerte pero las perspectivas no son alentadoras.
Si observamos el escenario internacional más caliente, ¿cree que la solución de los dos Estados, como se imagina actualmente, es un proyecto creíble para Palestina?
Personalmente, dudo de que lo sea por el momento. Cualquiera que sea la solución, no va a suceder nada hasta que Estados Unidos decida cambiar totalmente su manera de pensar y presione a los israelíes. Y no parece que eso vaya a suceder.

¿Cree que hay alguna parte del mundo donde todavía sea posible recrear proyectos positivos, progresistas?
En América Latina la política y el discurso público general todavía se desarrollan en los términos liberal-socialistas-comunistas de la vieja Ilustración. Esos son sitios donde encuentras militaristas que hablan como socialistas, o un fenómeno como Lula, basado en un movimiento obrero, o a Evo Morales. Adónde conduce eso es otra cuestión, pero todavía se puede hablar el viejo lenguaje y todavía están disponibles las viejas formas de la política.
No estoy completamente seguro sobre América Central, aunque hay indicios de un pequeño resurgir en México de la tradición de la Revolución; tampoco estoy muy seguro de que vaya a llegar lejos, ya que México ha sido integrado a la economía de Estados Unidos. América Latina se benefició de la ausencia de nacionalismos etnolingüísticas y divisiones religiosas; eso hizo mucho más fácil mantener el viejo discurso. Siempre me sorprendió que, hasta hace bien poco, no hubiera signos de políticas étnicas. Han aparecido movimientos indígenas de México y Perú, pero no a una escala parecida a la que se produjo en Europa, Asia o Africa. Es posible que en India, gracias a la fuerza institucional de la tradición laica de Nehru, los proyectos progresistas puedan revivir. Pero no parecen calar entre las masas, excepto en algunas zonas donde los comunistas tienen o han tenido un apoyo masivo, como Bengala y Kerala, y acaso entre algunos grupos como los nasalitas o los maoístas en Nepal.
Aparte de eso, la herencia del viejo movimiento obrero, de los movimientos socialistas y comunistas, sigue siendo muy fuerte en Europa. Los partidos fundados mientras Friedrich Engels vivía aún son, casi en toda Europa, potenciales partidos de gobierno o los principales partidos de la oposición. Imagino que en algún momento la herencia del comunismo puede surgir en formas que no podemos predecir, por ejemplo en los Balcanes e incluso en partes de Rusia. No sé lo que sucederá en China pero sin duda ellos están pensando en términos diferentes, no maoístas o marxistas modificados.
Siempre ha sido crítico con el nacionalismo como fuerza política, advirtiendo a la izquierda que no lo pintara de rojo. Pero también ha reaccionado contra las violaciones de la soberanía nacional en nombre de las intervenciones humanitarias.
¿Qué tipos de internacionalismo son deseables y viables hoy día?
En primer lugar, el humanitarismo, el imperialismo de los derechos humanos, no tiene nada que ver con el internacionalismo. O bien es una muestra de un imperialismo revivido que encuentra una adecuada excusa, sincera incluso, para la violación de la soberanía nacional, o bien, más peligrosamente, es una reafirmación de la creencia en la superioridad permanente del área que dominó el planeta desde el siglo XVI hasta el XX.
Después de todo, los valores que occidente pretende imponer son específicamente regionales, no necesariamente universales. Si fueran universales tendrían que ser reformulados en términos diferentes. No estamos aquí ante algo que sea en sí mismo nacional o internacional. Sin embargo, el nacionalismo sí entra en él porque el orden internacional basado en Estados-nación ha sido en el pasado, para bien o para mal, una de las mejores salvaguardas contra la entrada de extranjeros en los países. Sin duda, una vez abolido, el camino está abierto para la guerra agresiva y expansionista. El internacionalismo, que es la alternativa al nacionalismo, es un asunto engañoso. Es tanto un eslogan político sin contenido, como sucedió a efectos prácticos en el movimiento obrero internacional, donde no significaba nada específico, como una manera de asegurar la uniformidad de organizaciones poderosas y centralizadas, fuera la iglesia católica romana o el Komintern.
El internacionalismo significa que, como católico, creías en los mismos dogmas y tomabas parte en las mismas prácticas sin importar quién fueras o dónde estuvieras; lo mismo sucedía con los partidos comunistas. Esto no es realmente lo que nosotros entendíamos por "internacionalismo". El Estado-nación era y sigue siendo el marco de todas las decisiones políticas, interiores y exteriores. Hasta hace muy poco, las actividades de los movimientos obreros (de hecho, todas las actividades políticas) se llevaban a cabo dentro del marco de un Estado. Incluso en la UE, la política se enmarca en términos nacionales. Es decir, no hay un poder supranacional que actúe, sólo una coalición de Estados. Es posible que el fundamentalismo misionero islámico sea aquí una excepción, que se extiende por encima de los Estados, pero hasta ahora todavía no se ha demostrado. Los anteriores intentos de crear super-Estados panárabes, como entre Egipto y Siria, se derrumbaron por la persistencia de las fronteras de los Estados existentes.

¿Cree entonces que hay obstáculos intrínsecos para cualquier intento de sobrepasar las fronteras del Estado-nación?
Tanto económicamente como en la mayoría de los otros aspectos, incluso culturalmente, la revolución de las comunicaciones creó un mundo genuinamente internacional donde hay poderes de decisión que funcionan de manera transnacional, actividades que son transnacionales y, desde luego, movimientos de ideas, comunicaciones y gente que son transnacionales mucho más fácilmente que nunca. Incluso las culturas lingüísticas se complementan ahora con idiomas de comunicación internacional. Pero en la política no hay señales de esto y ésa es la contradicción básica de hoy. Una de las razones por las que no ha sucedido es que en el siglo XX la política fue democratizada hasta un punto muy elevado con la implicación de las masas. Para éstas, el Estado es esencial para las operaciones diarias.
Los intentos de romper el Estado internamente mediante la descentralización existen desde hace treinta o cuarenta años, y algunos de ellos con éxito; en Alemania la descentralización ha sido un éxito en algunos aspectos y, en Italia, la regionalización ha sido muy beneficiosa. Pero el intento de establecer Estados supranacionales fracasa. La Unión Europea es el ejemplo más evidente. Hasta cierto punto estaba lastrada por la idea de sus fundadores, quienes apostaban a crear un super-Estado análogo a un Estado nacional, cuando yo creo que ésa no era una posibilidad y sigue sin serlo. La UE es una reacción específica dentro de Europa. Hubo señales de un Estado supranacional en Oriente Próximo pero la UE es el único que parece haber llegado a alguna parte.
No creo que haya posibilidades para una gran federación en América del Sur. El problema sin resolver continúa siendo esta contradicción: por una parte, hay prácticas y entidades transnacionales que están en curso de vaciar el Estado quizá hasta el punto de que colapse. Pero si eso sucede -lo que no es una perspectiva inmediata, por lo menos en los Estados desarrollados- ¿Quién se hará cargo entonces de las funciones redistributivas y de otras análogas, de las que hasta ahora sólo se ha hecho cargo el Estado? Este es uno de los problemas básicos de cualquier clase de política popular hoy en día.
El nacionalismo fue una fuerza motriz de los siglos XIX y XX. ¿Cuál es su lectura de la situación actual?
No hay duda de que, históricamente, el nacionalismo fue, en gran medida, parte del proceso de formación de los Estados modernos, que requerían una forma de legitimación diferente del tradicional Estado teocrático o dinástico. La idea original del nacionalismo fue la creación de Estados grandes y me parece que esta función unificadora y ampliadora fue muy importante. Un caso típico fue la Revolución francesa, donde en 1790 apareció la gente diciendo "ya no somos del delfinado o del sur, todos nosotros somos franceses". En una etapa posterior, a partir de la década de 1870, encuentras movimientos de grupos dentro del Estado a la búsqueda de sus propios Estados independientes.
Esto, desde luego, produjo el wilsoniano momento de la autodeterminación, aunque por fortuna en 1918-1919 se corrigió hasta cierto punto por algo que desde entonces ha desaparecido por completo, es decir, por la protección de las minorías. Se reconoció que ninguno de estos nuevos Estados-nación era, de hecho, étnica o lingüísticamente homogéneo. Pero, después de la Segunda Guerra Mundial, la debilidad de los acuerdos existentes fue abordada no sólo por los rojos, sino por todo el mundo, con la deliberada y forzosa creación de la hegemonía étnica. Esto trajo una enorme cantidad de sufrimiento y crueldad y, a largo plazo, tampoco funcionó.
Sin embargo, hasta ese período, ese nacionalismo de tipo separatista operaba razonablemente bien. Se vio reforzado después de la Segunda Guerra Mundial por la descolonización, que por su naturaleza creó más Estados; y fue reafirmado aún más a finales del siglo por el colapso del imperio soviético, que también creó nuevos mini-Estados separados, incluidos muchos que, como en las colonias, realmente no habían querido separarse y para los cuales la independencia vino impuesta por la fuerza de la historia. Creo, por otro lado, que la función de los Estados pequeños, separatistas, que se han multiplicado tremendamente desde 1945, ha cambiado. Una razón de ello es que ahora se los reconoce como existentes. Antes de la Segunda Guerra Mundial, mini-Estados como Andorra, Luxemburgo y todos los demás no estaban reconocidos como parte del sistema internacional, excepto por los coleccionistas de sellos. La idea de que todas las unidades políticas existentes, hasta llegar a la Ciudad del Vaticano, son ahora un Estado y potencialmente un miembro de Naciones Unidas es nueva.
También está bastante claro que, en términos de poder, estos Estados no son capaces de desempeñar el papel de los Estados tradicionales, no poseen capacidad para hacer la guerra a otros Estados. Se han convertido, como mucho, en paraísos fiscales o bases secundarias para decisores transnacionales. Islandia es un buen ejemplo; Escocia no está muy lejos. La base del nacionalismo ya no es la función histórica de crear una nación como un Estado-nación. Ya no es, por así decir, un eslogan demasiado convincente. En otro momento pudo ser eficaz como medio para crear comunidades y organizarlas contra otras unidades políticas o económicas, pero hoy el elemento xenófobo en el nacionalismo es cada vez más importante. Las causas de la xenofobia son ahora mucho mayores de lo que lo eran antes. Es cultural más que política -ahí está el auge del nacionalismo inglés o escocés de los últimos años-, pero no por eso menos peligrosa.

¿No incluía el fascismo esas formas de xenofobia?
En cierto sentido, el fascismo era todavía parte de una corriente para crear grandes naciones. No hay duda de que el fascismo italiano fue un gran salto adelante para convertir a los calabreses y umbrienses en italianos; e incluso en Alemania no lo fue hasta 1934 cuando los alemanes pudieron ser definidos como alemanes y no como germanos porque eran suevos, francos o sajones. Ciertamente, el fascismo alemán y el de Europa Central y del Este estaban apasionadamente en contra de los extranjeros -principalmente, pero no sólo-, contra los judíos. Y, por supuesto, el fascismo proporcionaba pocas garantías contra los instintos xenófobos. Una de las enormes ventajas de los viejos movimientos obreros era que ellos sí proporcionaban esa garantía. Esto quedó claro en Sudáfrica: si no llega a ser por el compromiso con la igualdad y la no discriminación de las organizaciones de la izquierda tradicional, la tentación de venganza sobre los afrikaners hubiera sido mucho más difícil de resistir.

¿Las dinámicas separatistas y xenófobas del nacionalismo operan ahora en los márgenes de la política mundial más que en el centro?
Sí, creo que es probable que eso sea cierto, aunque hay áreas como el sureste de Europa donde ha hecho una gran cantidad de daño. Desde luego, todavía el nacionalismo -o el patriotismo o la identificación con un pueblo específico, no necesariamente definido étnicamente- es un enorme activo para otorgar legitimidad a los gobiernos. Éste es el caso de China. Uno de los problemas de India es que ellos no tienen nada parecido a eso. Obviamente, Estados Unidos no puede basarse en la unidad étnica, pero sin duda tiene fuertes sentimientos nacionalistas. En muchos de los Estados que funcionan correctamente esos sentimientos permanecen. Ésta es la razón por la que la emigración masiva crea más problemas en la actualidad.

Ahora que llega tanta gente nueva a Europa y a Estados Unidos, ¿cómo prevé el funcionamiento de las dinámicas sociales de la inmigración contemporánea? ¿Habrá un crisol europeo similar al estadounidense?
Pero en Estados Unidos el crisol dejó de serlo ya en los años sesenta. Además, a finales del siglo XX, la migración es muy diferente de la de periodos anteriores, principalmente porque emigrando ya no se rompen los lazos con el pasado hasta el mismo punto que antes. Puedes seguir viviendo en dos, posiblemente incluso en tres mundos al mismo tiempo, e identificarte con dos o tres lugares diferentes. Puedes seguir siendo guatemalteco mientras estás en Estados Unidos. También hay situaciones, como en la UE, donde de facto la inmigración no crea la posibilidad de asimilación.
Un polaco que llega al Reino Unidos no se supone que sea otra cosa que un polaco que viene a trabajar. Esto es, desde luego, nuevo y por completo diferente de la experiencia, por ejemplo, de la gente de mi generación -la de los emigrados políticos, aunque yo no fuera uno de ellos-, en la que tu familia era británica, pero culturalmente uno nunca dejaba de ser austríaco o alemán, y sin embargo, a pesar de todo, uno pensaba que debía ser inglés. Incluso cuando regresaban a sus países, no era lo mismo, el centro de gravedad había cambiado. Creo que es esencial mantener las reglas básicas de la asimilación; que los ciudadanos de un determinado país deberían comportarse de determinada manera y tener determinados derechos, que éstos deberían definirlos y que ello no debería quedar debilitado por argumentos multiculturales. Francia, a pesar de todo, había integrado a tantos de sus inmigrantes extranjeros como Estados Unidos, en términos relativos, y ciertamente la relación entre los locales y los antiguos inmigrantes es aún mejor ahí. Esto se debe a que los valores de la República francesa siguen siendo esencialmente igualitarios.
Hoy crece la opinión de que la religión ha regresado como una fuerza poderosa en un continente tras otro. ¿Cree que éste es un fenómeno de superficie más que de profundidad?
Es claro que la religión -como la ritualización de la vida, la creencia en la influencia de espíritus o entidades no materiales y, sobre todo, como un vínculo de unión de las comunidades- está tan extendida a lo largo de la historia que sería un error considerarla un fenómeno superficial o destinado a desaparecer; al menos entre los pobres y los débiles, que probablemente necesiten más sus consuelos y sus potenciales explicaciones de por qué las cosas son como son. Hay sistemas de gobierno, como el chino, que, a efectos prácticos, carecen de cualquier cosa que equivalga a lo que nosotros consideraríamos como religión.
Ellos demuestran que eso es posible, pero creo que uno de los errores de los movimientos socialistas y comunistas tradicionales fue intentar extirpar violentamente la religión en tiempos donde podría haber sido mejor no hacerlo. Después de la caída de Mussolini en Italia, uno de los cambios más interesantes llegó cuando Togliatti dejó de discriminar a los católicos practicantes: hizo bien en hacerlo. De otra manera no hubiera logrado que el 14 por ciento de las amas de casa votasen a los comunistas en los años cuarenta. Esto cambió el carácter del Partido Comunista Italiano, que pasó de ser un partido leninista de vanguardia a un partido de clases de masas o un partido popular. Por otra parte, es cierto que la religión ha dejado de ser el lenguaje universal del discurso público y, en esa medida, la secularización ha sido un fenómeno global, aun cuando sólo haya debilitado a la religión organizada en algunas partes del mundo.
En Europa todavía sigue haciéndolo; por qué no ha ocurrido esto en Estados Unidos no está tan claro, pero no hay duda de que la secularización se ha impuesto en gran medida entre los intelectuales y otros que no la necesitan.
Para la gente que continúa siendo religiosa, el hecho de que ahora haya dos lenguajes para el discurso produce una cierta clase de esquizofrenia que se puede ver bastante a menudo, por ejemplo, en los judíos fundamentalistas de Cisjordania: creen en lo que son tonterías patentes, pero trabajan como expertos en tecnologías de la información. El actual movimiento islámico está compuesto en gran parte por jóvenes tecnólogos y técnicos de esta clase. Las prácticas religiosas, sin duda, cambiarán sustancialmente. El que ello vaya a producir una mayor secularización no está claro.
Desde luego, el declive de las ideologías de la Ilustración ha dejado mucho más espacio para las políticas religiosas y para versiones religiosas del nacionalismo, pero no creo que haya habido un gran avance de todas las religiones. Muchas van cuesta abajo. El catolicismo romano está luchando con mucha energía, incluso en América Latina, contra el auge de las sectas protestantes evangélicas, y estoy seguro de que se mantiene en Africa sólo por las concesiones a las costumbres y hábitos locales. Las sectas protestantes evangélicas están creciendo, pero no está claro hasta qué punto son algo más que una pequeña minoría de los sectores socialmente en ascenso, como fueron los inconformistas en Inglaterra. Tampoco está claro que el fundamentalismo judío, que hace tanto daño en Israel, sea un fenómeno de masas.
La única excepción a esta tendencia es el Islam, que ha continuado expandiéndose sin que haya habido ninguna actividad misionera efectiva durante los siglos pasados. Dentro del Islam no está claro si tendencias como el actual movimiento para restaurar el califato representan algo más que a una minoría militante. De cualquier forma, me parece que el Islam tiene grandes activos que le permitirán continuar creciendo, principalmente porque da a la gente pobre la sensación de que son tan buenos como cualquiera y de que todos los musulmanes son iguales.
¿No se podría decir lo mismo del Cristianismo?
Pero un cristiano no cree que él sea tan bueno como cualquier otro cristiano. Dudo que los cristianos negros crean que ellos son tan buenos como los colonizadores cristianos, mientras que los musulmanes negros sí lo creen. La estructura del Islam es más igualitaria y el elemento militante es más fuerte. Recuerdo haber leído que los comerciantes de esclavos en Brasil dejaron de importar esclavos musulmanes porque se rebelaban continuamente. Desde nuestra posición, este atractivo tiene considerables peligros: en alguna medida, el Islam hace a los pobres menos receptivos a otros llamamientos a favor de la igualdad. En el mundo musulmán, los progresistas sabían desde el principio que no había manera de alejar a las masas del Islam; incluso en Turquía tuvieron que llegar a alguna clase de modus vivendi, probablemente el único lugar donde esto se produjo de manera satisfactoria. En otros sitios, el auge de la religión como un elemento de la política, de la política nacionalista, ha sido en extremo peligroso.
La ciencia era parte central de la cultura de la izquierda antes de la Segunda Guerra Mundial, pero luego desapareció como elemento dirigente del pensamiento marxista o socialista. ¿Cree que los temas ambientales pueden provocar la reincorporación de la ciencia a la política radical?
Estoy seguro de que los movimientos radicales estarán interesados por la ciencia. Las preocupaciones ambientales y de otro tipo producen sólidas razones para contrarrestar la huida de la ciencia y de la aproximación racional a los problemas que se generalizó bastante durante los años setenta y ochenta. Pero, con respecto a los propios científicos, no creo que suceda. A diferencia de los científicos sociales, no hay nada que una a los científicos naturales con la política. Históricamente hablando, en la mayoría de los casos han permanecido apolíticos o tenían los estándares políticos de su respectiva clase. Hay excepciones, por ejemplo, entre la juventud a principios del siglo XIX en Francia y muy notablemente en las décadas de los años treinta y cuarenta. Pero éstos son casos especiales debidos al reconocimiento de los propios científicos de que su trabajo estaba siendo cada vez más esencial para la sociedad, pero que la sociedad no se daba cuenta.
En el siglo XX la física fue el centro del desarrollo, mientras que en el siglo XXI lo es la biología. Al estar más cerca de la vida humana puede haber un elemento de politización mayor, pero ciertamente hay un factor que lo contrarresta: cada vez más los científicos han sido integrados en el sistema capitalista, tanto los individuos como las organizaciones. Hace cuarenta años hubiera resultado impensable hablar de patentar un gen. Hoy uno patenta un gen con la esperanza de hacerse millonario, y eso ha alejado a un nutrido grupo de científicos de la política de izquierda. Lo único que todavía puede politizarlos es la lucha contra gobiernos dictatoriales o autoritarios que interfieran en su trabajo. Desde luego, el medio ambiente es un tema que puede mantener movilizado a un cierto número de científicos. Si hay un desarrollo masivo de campañas alrededor del cambio climático, entonces los expertos se encontrarán comprometidos, principalmente contra ignorantes y reaccionarios. Por eso no está todo perdido.
Si debiera escoger temas o campos aún sin explorar que presenten desafíos para futuros historiadores, ¿cuáles elegiría?
El gran problema es uno muy general. En virtud de los estándares paleontológicos, la especie humana ha transformado su existencia a una velocidad asombrosa, pero el grado de cambio ha variado enormemente. Algunas veces se ha movido muy despacio, algunas veces muy deprisa, algunas de manera controlada, otras no. Claramente, esto implica un creciente control sobre la naturaleza, pero no deberíamos afirmar que sabemos adónde nos conduce. Los marxistas se han centrado correctamente sobre los cambios en el modo de producción y sus relaciones sociales como los generadores del cambio histórico. Sin embargo, si pensamos en términos de cómo "los hombres hacen su propia historia", la gran pregunta es ésta: históricamente, las comunidades y los sistemas sociales han apuntado hacia la estabilización y la reproducción, creando mecanismos capaces de mantener a raya saltos perturbadores hacia lo desconocido. La resistencia contra la imposición del cambio desde afuera es todavía un factor importante de la política mundial actual. ¿Cómo, entonces, unos seres humanos y unas sociedades estructuradas para resistir el desarrollo dinámico aceptan un modo de producción cuya esencia es su interminable e impredecible desarrollo dinámico? Los historiadores marxistas podrían investigar con provecho el funcionamiento de esta contradicción básica entre los mecanismos que traen el cambio y los preparados para resistirlo.

22 jun 2010

DIVERSIDAD CULTURAL E INDIGENA EN LOS MEDIOS - por agora 21

PIDEN EN LA ONU
UNA MAYOR DIVERSIDAD
CULTURAL E INDIGENA
EN LOS MEDIOS


El Relator especial para la promoción de la libertad de expresión y de opinión de las Naciones Unidas, Frank La Rue, se pronunció a favor de una mayor presencia de indígenas en los medios, exhortó al respeto y la diversidad y destacó el valor social que tienen los medios de comunicación comunitaria, en el segundo informe anual que presentó ante el organismo.
El texto del documento realizado por La Rue apela a los Estados y a los medios de comunicación social, a adoptar medidas necesarias para fomentar en los medios de información públicos y privados, la diversidad cultural e indígena.
En su segundo informe anual, presentado a la Asamblea General de la ONU, La Rue animó a los medios de comunicación social a que su personal sea representativo y diverso y exhortó a la prensa a generar un ambiente de respeto a la diversidad cultural y multicultural.
"Los Estados deben promover y proteger los idiomas de las minorías y los pueblos indígenas y en ningún caso las restricciones a la libertad de expresión, pueden emplearse para acallar el legítimo reclamo de los derechos de esta población", indicó.
El Relator señaló que los pueblos originarios tienen derecho de establecer sus propios medios de información, en sus propios idiomas y a acceder a todos los demás medios no indígenas, sin discriminación.
Por otro lado, consideró que los medios de comunicación comunitaria son instrumentos efectivos para que los grupos minoritarios puedan dar, recibir y transmitir la información. "Es deber de los Estados apoyarlos y garantizar su acceso en forma equitativa", señaló en el documento.
El experto expresó que proteger el derecho a la expresión de los grupos sociales menos favorecidos demanda de los Estados la creación de un marco legal de telecomunicaciones basado en principios democráticos y cuyo objetivo sea el acceso de todos los sectores sociales.


Fuente: www.neuronasatentas.blogspot.com

20 jun 2010

UN CLAVEL ROJO PARA MANUEL BELGRANO – POR JUAN BAZAN



HOY ES EL DIA DE "LA CELESTE Y BLANCA"..., nuestra bandera nacional, que en estos instantes, sus colores ondean como obsesión sólo en los deseos "futboleros" de la mayoría de los argentinos.
Esto nos recuerda, y queremos compartirlo, que esos colores "sagrados" no siempre fueron ese telón de fondo sobre el que se explota el patrioterismo... Hubo otro tiempo que esos colores –al celeste y blanco- estuvieron ligados para todos los argentinos a la "paternidad" sobre aquello que simboliza la Patria: la propiedad de nuestro destino, el cuidado de nuestro suelo nativo, de su independencia, de nuestra LIBERTAD. Sabemos todos, aún cuando apenas veneramos su memoria, que ese símbolo –tan importante para todos- nació en el corazón de aquel Manuel Belgrano para que nos acompañara hacia luces más propicias. Que su sueño fue valiosos, para nosotros que habitamos su futuro.
HOY MANUEL BELGRANO ES APENAS UN RECUERDO.
PERO MUCHOS NO LO OLVIDAMOS Y EN SU DIA LO RECORDAMOS CON UN CLAVEL ROJO, DEPOSITADO CON RESPETO EN SU TUMBA SOLITARIA DE LA AVENIDA BELGRANO (SIN ACTOS NI SIQUIERA EN SU DIA Y AQUÍ EN BUENOS AIRES) PORQUE LE ADUJICAMOS A EL (AL BASTANTE OLVIDADO) LA PATERNIDAD DE RECORDARNOS SIEMPRE A QUE PAIS PERTENECEMOS Y CON EL SÍMBOLO, QUIENES SOMOS.



...



Con la fiebre mundialista de estos días pasados, los colores de nuestra bandera, son convirtieron en el decorado de fondo (fundamentalmente político-mediático), de casi todo un espectáculo recurrente que fue sucediendo ante nuestros ojos. Un decorado –quizás cuestionable- dónde los argentinos depositan emocionalmente gran parte de sus aspiraciones, ilusiones y frustraciones.
Aun cuando no siempre fue así, ahora con el fútbol, todo tiene que ver con la celeste y blanca... especialmente esa variante que explota esa extraña forma del patrioterismo. Y con mucho éxito... Pero sabemos que casi nada es como la habitual representación mental que tenemos de los hechos, y también en la historia de la "celeste y blanca", existen enigmas y poco conocidos datos que a esta altura ya parecen secretos conspirativos. Estos son algunos datos sobre el tema.

HISTORIAS
SOBRE LA BLANCA
Y AZUL CELESTE
Algo es totalmente cierto: Nuestra enseña patria es obra de la tenacidad de Manuel Belgrano. El prócer la impuso como símbolo nacional antes de que el gobierno la aprobase como tal. Los testimonios de una historia casi misteriosa siguen guardados en libros que pocos leen. En este repaso de la literatura existente, nos iremos enterando de aquello que ya deberíamos saber: no todo es lo que parece en aquello que cultivamos como memoria colectiva.
Sobre los colores de la bandera hay controversias, anécdotas y leyendas. Además, en diversas ocasiones, se ha especulado sobre el interrogante de los motivos que llevaron a Manuel Belgrano a elegir los colores blanco y azul celeste para la bandera que enarboló en las Barrancas del Paraná, algo que de todas formas tiene su explicación. En la "Gran Enciclopedia Argentina" que dirigiera Diego Abad de Santillán, se advierte que "esos colores estaban en el ambiente y fueron volviéndose tradición y más adelante los morenistas los usaron para diferenciarse de los savedristas y proclamar su fe en la Revolución de Mayo". Es oportuno recordar –según el mismo texto-, que ya los llevaban los húsares de Pueyrredón cuando sucedieron las invasiones inglesas.
Con respecto al primer tema, es Dardo Corvalán Mendilaharsu quien en el capítulo "Los símbolos patrios" de la Historia Argentina editada por la Academia Nacional de la Historia, afirma que cuando French llega a la Plaza el 25 de Mayo y observó que una parte del pueblo se había refugiado de la lluvia bajo la Recova, "se adornaba ya con la divisa en el sombrero de una cinta azul y otra blanca". Al ver eso, French actuó con rapidez y compró cintas de esos colores que repartió entre los suyos para diferenciarlos de los españoles que portaban una cinta roja. Esto nos permite decir que los colores de nuestra insignia patria se empezaron a popularizar con la Revolución de Mayo.
Ya en plena guerra independista, fue Manuel Belgrano quien planteó la necesidad de sustituir los colores españoles por otros que nos identificaran. Comprendía la necesidad de diferenciar a las tropas de la revolución de las realistas, y el 13 de febrero de 1812 escribe al Triunvirato desde Rosario: "Parece que ha llegado el caso de que se sirva declarar la escarapela nacional que debemos usar para que no se equivoque con la de nuestros enemigos y no haya ocasiones que puedan sernos de perjuicio, y como por otra parte hay cuerpos del ejército que la llevan diferente, de modo que casi sea una señal de división, cuyas sombras, si es posible, deben alejarse como Vuestra Excelencia sabe, me tomo la libertad de exigir la declaración que antes expuse".
El Triunvirato recién resuelve la situación el 18 de mayo de 1812 al disponer que los colores blanco y azul celeste serían los colores de la escarapela, por lo cual la posteridad establece el 18 de mayo como Día de la Escarapela. Como Belgrano no recibió la respuesta con la rapidez que esperaba, decide avanzar aún más para tener un símbolo propio, y lo hace en las Barrancas del Paraná al inaugurar las baterías Independencia y Libertad el 27 de febrero de 1812, fecha en que enarboló la bandera blanca y azul celeste, colores que todavía no habían sido aprobados para la escarapela nacional por el Triunvirato.
En esta ocasión, comunicaba que "siendo preciso enarbolar bandera, y no teniéndola, la mandé hacer blanca y azul celeste, conforme a los colores de la escarapela nacional; espero que sea de la aprobación de V.E.".
El Primer Triunvirato lo desautorizó con severidad porque "enarbolando la bandera blanca y celeste, como indicante de que debe ser nuestra divisa, las cree este gobierno de una influencia capaz de destruir los fundamentos con que se fundan nuestras operaciones y protestas", refiriéndose a la proclamada lealtad a Fernando VII.
Belgrano acató la orden, pero en el segundo aniversario del 25 de Mayo, que lo encuentra en Jujuy, volvió a enarbolar una bandera con los mismos colores. El abanderado fue el barón de Holmberg que, además, la llevó hasta los balcones del Cabildo jujeño donde fue bendecida por el canónigo Juan Ignacio Gorriti.
Estos hechos le ocasionan a Belgrano una nueva reprimenda del gobierno de Buenos Aires, que le advierte que será "la última vez que sacrificará hasta tal punto los respetos de su autoridad y los intereses de la Nación", y le ordena que a vuelta de correo dará cuenta exacta de lo que haya hecho, en cumplimiento de esta suprema resolución".
La respuesta de Belgrano también fue terminante. Decía que "la bandera la he recogido, y la desharé para que no haya ni memoria de ella"… "pero si acaso me preguntaren por ella responderé que se reserva para el día de una gran victoria del Ejército".

Belgrano tenía muy en claro que el significado de un símbolo hacía que su importancia iba más allá de distinguir amigos y enemigos, porque actuaba como factor aglutinante antes, durante y después de las batallas, y era un símbolo de identidad.
Además del episodio referido a la bandera, Belgrano había recibido la orden de no dar batalla y replegarse hasta Córdoba, orden que no acató y en cambio trataba de reorganizar el ejército para frenar el avance de los españoles. Así les da batalla en Tucumán, obteniendo un triunfo resonante. Vuelve a enarbolar la bandera celeste y blanca, cumpliendo lo que había prometido hacer en ocasión de "una gran victoria del Ejército".
José María Paz relata en sus "Memorias Póstumas" que en el Río Pasaje "tuvo lugar la solemnidad del juramento, que se recibió del ejército de defender el nuevo pabellón celeste y blanco, que adoptaba nuestro país". En este caso, no hubo reprimenda de Buenos Aires porque había cambiado la orientación política con un nuevo Triunvirato y la reunión de la Asamblea General Constituyente que aprobó emitir moneda propia, un escudo nacional y una "Marcha patriótica "que anuncia la independencia de "una nueva y gloriosa Nación".
Pedro Agrelo, que fue asambleísta, comenta que si bien no se aprobó la nueva bandera "se mandó quitar de todas partes la bandera española y se sustituyó, de hecho, por un nuevo escudo". A su vez Beruti, en sus "Noticias curiosas", expresa que en ocasión del tercer aniversario de la Revolución "no se puso bandera española en el fuerte, antes por el contrario se le quitó el mastelero del asta de bandera donde se ponía, sintiéndose que no se hubiera puesto la nuestra en reemplazo de aquella".
Ricardo O. Jacob, en una extensa nota que publica en "Todo es Historia" de junio-julio de 1992 bajo el título "Los colores nacionales", señala que el Cabildo de Salta, con motivo del tercer aniversario de la Revolución de Mayo, solicita "al gobierno los fondos necesarios para formar una bandera con las armas de la Asamblea el 14 de mayo. Así se hizo en ese tercer aniversario, según lo cuenta Feliciano Chiclana: "Es el nuevo estandarte de color celeste y blanco con cordones, borlas y aparejos del mismo color: por un costado se ven las armas del Estado, que con el árbol, el gorro de la Libertad, sostenidos de los brazos unidos y rodeado de dos guirnaldas, y por la parte superior un sol naciente con esta inscripción en toda la circunferencia: Soberana Asamblea General Constituyente de las Provincias Unidas del Río de la Plata".
Jacob advierte que "es difícil establecer si este estandarte se aproxima a las características de la bandera de Belgrano. Tal vez no por ser justamente un estandarte. Sólo establece que sus colores son celeste y blanco, pero no dice si las franjas –que son dos-, deben ser verticales u horizontales. Muchos estudiosos del tema se inclinan a creer que se trata de franjas verticales. De ser así, es muy probable que ésta haya servido de modelo a la Bandera de los Andes".
La oficialización de la bandera nacional debió esperar hasta que el Congreso de Tucumán, luego de declarar la Independencia, resolviera en sesión del 20 de julio de 1816 que "Elevadas las Provincias Unidas en Sud América al rango de una Nación, después de la declaración solemne de su Independencia, será su peculiar distintivo la bandera celeste y blanca que se ha usado hasta el presente, y se usará en lo sucesivo exclusivamente en los ejércitos, buques y fortalezas en clase de bandera menor, ínterin sea decretada al término de las presentes discusiones la forma de gobierno más conveniente al territorio".
Manuel Belgrano, con su tenacidad, fue logrando que la insignia se hiciese carne en la opinión pública antes de que el gobierno se decidiese a declarar a la bandera el símbolo nacional de los argentinos. Esto explica también que el día de la muerte del prócer, el 20 de junio, haya sido decretado el Día de la Bandera en su honor. Lo que pocos saben es como llegó "nuestra celeste y blanca" a tomar la forma que actualmente tiene.

14 jun 2010

Estadio Soccer City del Mundial de Fútbol




El Estadio Soccer City
es el lugar privilegiado de
la Copa Mundial de Fútbol,
Sudáfrica 2010.


Se encuentra en Johannesburgo. Construida en 1987 fue ampliado en 2008 al 2009 y remodelado para Sudáfrica 2010. Siendo la alfarería una de las actividades más importantes que el ser humano ha llevado a cabo con gran destreza desde las épocas más remotas en el continente africano, el diseño del Soccer City, realizado por Responsable del Soccer City fue la empresa de arquitectura Bob van Bebber de Boogertman Urban Edge + Partners. La idea base para su implementación gira sobre las ollas de barro usada desde milenios atrás en la vida sudafricana.
"Hoyo de fuego" era el nombre de una hondonada sobre la cual se construyó el Soccer City al cual también se lo comenzó a llamar "Crisol de las culturas"
Cuando el estadio tuvo que ser reconstruido se utilizó materiales que reafirmaban el efecto "olla de barro" utilizándose paneles modulares de acero y concreto laminado reforzado con fibra de vidrio. Los paneles son seis colores diferentes. Algunos están perforados, otros fueron pulidos y otros son paneles "virtuales", estos últimos son huecos de diferentes dimensiones distribuidos alrededor de la fachada.
Todo armado de tal forma que genera visión de movilidad apuntando a que se relacione con los decorados que los artesanos producen en las vasijas de barro. El mejor impacto de la fachada se produce durante la noche cuando el estadio está totalmente iluminado..
Si bien el Soccer City fue el primer estadio de futbol de nivel Internacional de Sudáfrica, se lo utilizó principalmente para partidos de rugby. Allí se desarrollo la Copa Africana de Naciones de 1996 y otros eventos, entre ellos el primer discurso multitudinario de Nelson Mandela después de su liberación en 1990 y en 1993 el homenaje póstumo a Chris Hani, uno de los líderes políticos más importantes de Sudáfrica que, junto con Nelson Mandela, luchó durante años para acabar con la discriminación racial (apartheid).
Originalmente tenía 78.000 asientos. Para el Mundial 2010 tiene 94.700. Es el Estadio más grande de Africa.


UN AMIGO LO DESCRIBIO DE ESTA FORMA:
Imponente, raro y magestuoso aparece la figura de ese estadio hermoso. El Soccer City es considerado uno de los más artísticos e inspiradores de Africa que fue construido casi en su totalidad y conservó sólo una tribuna de la vieja estructura, servirá de escenario para el partido inaugural y la final del Mundial.
Se inspiraron en la calabash que es una olla de cerámica en forma de calabaza muy característica de los nativos de esta zona. Esta inmensa estructura también tiene sus colores rojos y amarillos y tanto en la pintura como con la iluminación asemeja una olla que se está calentando al fuego. Está ubicado el sudoeste de Johannesburgo, pegado a la zona de la Soweto.
Fue magnífica la sorpresa al ver ese estadio al que tanto habíamos observado a través de fotografías y la TV. Estar en ese lugar, frente al coloso, nos llenó de emoción, como si fuese el empujón inicial de tantos momentos fuertes que nos esperan. Este Soccer City además representa mucho para los sudafricanos que fue el lugar en donde Nelson Mandela dio su primer discurso para una multitud, tras haber quedado liberado después de pasar 27 años preso.
Caben casi 85 mil personas y es el más grande de los que se ocuparán para el Mundial.
Ayer la selección de Sudáfrica practicó aquí y después lo hizo México y se verán hoy en le partido inaugural.
Hoy una multitud conocerá esta estructura fenómenal del lado de adentro.
En el mismo predio grandes carpas se han levantado para distintas funciones. En una de ellas, de lona pero con un esqueleto de metal, está en centro de prensa. Ocupa casi una cuadra y allí circulan miles de periodistas y pueden trabajar unos 800 a la vez. El decorado de las paredes con afiches resaltan del color blanco de la lona y el techo. Pero a su vez hay precariedades como el servicio de internet, que no puede lidiar con tantas notebooks que quieren escupir información a la vez.
Además este tema de las notebooks personales es como una obligación para trabajar en el sitio porque no tiene a disposición otras computadoras. Una cafetería, a 9 pesos nuestros, el vaso de buenas dimensiones, un negocio de comidas rápidas y un restaurant con un menú diario a 37 pesos es lo que ofrede el servicio gastronómico del lugar.
Se puede tener una mala tarde, si uno se queda sin batería porque los enchufes son distintos a los nuestros y hay que pedir el favor de los colegas que van terminando para disponer de un adptador. Son gajes del oficio. Sin enchufe no hay trabajo. Sin conexión no hay informe.

Estamos en Africa y en un Mundial. Hay que disfrutar a pesar de los inconvenientes, que para otros serían detalles.

8 jun 2010

PERIODISTAS EN SU DIA - EN AGORA 21



AGORA 21 saluda HOY a los compañeros periodistas, en su Día, esta vez conmemorativo del Bicentenario de la aparición de la Gazeta de Buenos Ayres, primer periódico patrio que sirvió para informar, formar y organizar en la causa de la Revolución de Mayo, única triunfante en nuestra América.


5 jun 2010

ENRIQUE DEL VALLE IBERLUCEA POR JUAN CARLOS NICOLAU

El estimado intelectual, historiador y autor de valiosos textos sobre nuestra historia, el amigo Juan Carlos Nicolau, nos ha permitido subir al blog este trabajo de recordación de la personalidad de Del Valle Iberlucea. Para el autor del texto, en la celebración del Bicentenario, este se merece ser tenido en cuenta como símbolo del aporte efectuado por sucesivas generaciones de inmigrantes al desarrollo y progreso de la Nación Argentina. El aporte de Nicolau se torna valioso –recomendamos su lectura y aceptamos comentarios- por la necesidad que existe de celebrar menos y en cambio bucear más en nuestras raíces para que "este festejo" de los 200 años de la Revolución de Mayo tenga algún sentido y algo de trascendencia.

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Primer senador socialista argentino.
Por Juan Carlos Niculau



La memoria de quien fuera el primer senador socialista argentino permanece relegada en el olvido quizá, por su prematuro fallecimiento, a la edad de 44 años, en 1921, poco después de ser desaforado en el Senado de la Nación por su apoyo a la IIIa Internacional Comunista, actitud que poco antes también había rechazado el congreso de su partido reunido en la ciudad de Bahía Blanca. Durante su breve vida realizó una labor política, educativa e intelectual que, por cierto, merecería mayor reconocimiento de la sociedad argentina, particularmente en épocas de crisis cuando el futuro asoma incierto.
Humanista, político, legislador y orador notable del Valle Iberlucea careció del tiempo necesario para expresar con mayor amplitud su pensamiento en un libro orgánico destinado a este propósito, pero su actividad publica quedo diseminada en múltiples conferencias, proyectos parlamentarios, documentos jurídicos, ensayos y artículos periodísticos.
En su trayectoria se destaca por su condición de político revolucionario sin fisuras, correctamente ubicado en las condiciones objetivas en las cuales debió actuar para defender el interés social y económico del proletariado. Fue un hombre de acción, sin que esta circunstancia disminuya su notable labor como catedrático universitario, su actuación legislativa y su conocimiento jurídico, expuestos en un extenso número de proyectos de ley, en sus trabajos históricos y sus discursos parlamentarios preñados de ideas. En todas estas tareas se destaca su personalidad de gran humanista, lejos del intelectual refugiado en una torre de marfil.
Las críticas que recibió de aquellos que estudiaron posteriormente su accionar político olvidan las circunstancias de tiempo y lugar que le dieron origen, mientras otros en cambio elogiaron su desempeño partidario y sus ideas. Carlos Sánchez Viamonte (1892-1972) en el prologo al libro que reproduce los artículos y discursos mas significativos de su labor política entre 1917 y 1921, manifestó "es su vida un ejemplo inobjetable de sinceridad y dignidad, aún para aquellos que niegan acierto en su conducta ideológica". (LRR 1934, 11). A pesar de las objeciones, todos, estuvieron de acuerdo en reconocer su indudable conocimiento de la teoría marxista y su defensa incondicional de los derechos de los trabajadores.
Benito Marianetti señaló, "Su trayectoria política fue la de una conciencia honrada" (Marianetti 1972) mientras Emilio J. Corbiére, enfatizó que "representó en el socialismo argentino a la corriente doctrinaria y política vinculada al marxismo." (Corbiére 1987)
Emilio Frugoni, que estudió la historia y los fundamentos del socialismo desde sus primeras raíces, se refiere a la personalidad del Valle Iberlucea como una "vigorosa inteligencia y vasta ilustración", considerando que sus ideas representan "una adhesión casi absoluta al marxismo ortodoxo, y luego una afinidad de fondo con el comunismo soviético", opinión con la cual es difícil disentir a poco que se analice su accionar político e intelectual. (Frugoni 1947, II 291)
Mantuvo discrepancias con los compañeros de su partido, sin duda, por el detenido estudio que realizó de los trabajos de los luchadores por el socialismo a lo largo de todos los tiempos y, en particular de las obras relacionadas con el materialismo histórico.
Si bien es verdad que, en su momento atribuyó, importancia al medio geográfico y a la raza en el desarrollo social, tal como fue sostenido en su época por muchos pensadores, no es menos cierto que del Valle Iberlucea puso énfasis en la capacidad del trabajo para modificar las condiciones sociales del hombre, como se comprueba a lo largo de su historia, argumento que lo aleja de aquellos que pretenden observar en su pensamiento un determinismo económico estricto. En su artículo acerca de la industrialización en la Argentina se aparta de esa opinión al sostener que los obreros deben adquirir conciencia de su clase para poder avanzar en la transformación de la sociedad.
Cuando se encontró en minoría en el Congreso de Bahía Blanca con su propuesta de incorporación a la IIIa. Internacional, la posibilidad de su renuncia a su condición de afiliado al Partido Socialista, al cual había dedicado los mejores años de su juventud, probablemente no la concretó debido a su precario estado de salud, pese a ello luchó hasta el último minuto por las convicciones de toda su vida. En plena madurez, cuando no es utópico pensar que su labor política podía dar grandes frutos al país, el destino fue ingrato con su persona.
El análisis en detalle de su vivir comienza por ubicar la situación política del país de origen de sus padres, España, lugar donde nació. Luego su traslado a un espacio geográfico donde desarrolló parte de su niñez y sus estudios secundarios, para posteriormente dar a conocer su labor en la defensa de los derechos civiles y sindicales, su actividad periodística, sus escritos acerca de la historia argentina, su desempeño como legislador en el Senado de la Nación, en particular, sus importantes trabajos acerca de la teoría y la práctica del socialismo en su país de adopción al cual dedicó toda su energía.
Para mejor interpretar su pensamiento y su acción política y social es necesario explorar los escenarios de la época en la cuales vivió su padre, y los motivos que le llevaron a emigrar de España, que a su vez dejaron huella en su hijo. Andando los años, éste tenía un aspecto físico atractivo, pulcro, de frente amplia, largos bigotes según el estilo de la época, ojos oscuros de mirar firme. Ramón Columba, como taquígrafo del Congreso Nacional, elogió su voz "de timbre sonoro y dicción perfecta", lo cual le permitió ser un orador de mérito, en todas las tribunas y en la cátedra donde expuso su pensamiento con "verbo fino, elegante y sugestivo".
En una entrevista realizada por la revista Atlántida, el año de su deceso, el periodista señala que su presencia llama a evocar a los hombres que "honraron la tribuna, la cátedra y el libro" y "el espíritu austero de Joaquín Costa (1846-1911), el valiente de Aristóbulo del Valle (1845-1896), el magnifico de León Gambetta (1838-1882)". (LRR 1934,145)
Enrique del Valle Iberlucea merece el respeto de las generaciones argentinas como ejemplo de una labor humanista y política, aunque es triste reconocer que hoy apenas se recuerda su extraordinaria labor para lograr suprimir la alienación del hombre en la sociedad capitalista.
El diario "La Nación" en su edición del día 31, día posterior a su deceso, comentó que su vida había sido la de "una batallador tenaz, ardiente". Se había destacado como un "infatigable propagandista de su causa", consecuente con principios que a veces divergían de la opinión predominante en el seno de su partido. Sus opiniones se habían radicalizado cobrando un contenido más revolucionario, llegando a cuestionar el sistema parlamentario.
La elogiosa nota del matutino porteño hacia notar que, aparte de su actuación partidista "era un estudiosos y un catedrático distinguido que ponía en las tareas de investigación y de la enseñanza un encomiable celo". Por otra parte, destacaba la difusión que había realizado de los principios feministas con los cuales siempre había estado empeñado.


© Juan Carlos Nicolau - Junio 2010.