Quiso el destino que el clima intensificara sus efectos negativos justo cuando se desarrollaban las PASO. Muchos ciudadanos tuvieron que votar en lugares alejados de sus viviendas a causa de las inundaciones. Y el mal humor generalizado entre los votantes, debe haber tenido cierta influencia en los resultados electorales. La conclusión final se refiere a que a los problemas hay que enfrentarlos, y no esperar que factores exógenos aporten soluciones milagrosas.Una vez más el clima le está jugando una mala pasada a todos. Grupos sociales que el sistema mantiene marginado de la inclusion social se sumaron a la tragedia. Ademas, al campo, pareciera haberle tocada la misma suerte. No porque haya "algo especial en el campo", sino por su rol específico en el equilibro económico de este país. Como nos decia un chacarero amigo: "En medio de una campaña de granos finos ya de por sí vapuleada desde el arranque, se suman ahora los enemigos ocultos que los productores siempre tienen al acecho". Por lo cual, se entiende, ambos sectores (los marginados y los que producen) se encuentra en una situación caótica y prisioneros de un futuro impredecible.Las obras relacionadas con la inclusión social y en el campo productivo deben tener prioridad absoluta hasta como una cuaestion electora. El Plan Maestro (en la provincia de Buenos Aires) debe completarse para evitar males mayores. Y mucho más aún, cuando los sectores productivos genuinos como el campo, está viviendo una instancia de zozobra por falta de rentabilidad en sus explotaciones. Es decir: la disyuntiva para ellos es clara "Invertir no es gastar". De lo contrario, a la larga perdemos todos. Cabe preguntarse: ¿Quienes serán "los enemigos ocultos" de los que "el sistema" deja de lado y de quienes El Estado se ocupa poco y mal? (by juan bazán)
