28 nov 2006

TECNOLOGIA Y OTRAS CULTURAS

AHORA: LA GENERACIÓN DEL PULGAR

Por Gabriela Sharpe

Los jóvenes tienen una característica que los diferencia de las generaciones que los preceden: usan el pulgar. La nueva generación usa un dedo que los adultos manejan poco y nada, pero que a la hora de jugar y comunicarse se ha tornado protagonista. Por generación se entiende al conjunto de personas que viven una misma época, y la clasificación clásica que de ella se hace se basa en los años y el contexto socio-cultural predominante. Ahora, puede agregarse otro enfoque más peculiar: las generaciones se distinguen según el uso que hagan de los dedos de las manos. De este modo se separan dos generaciones: la de los adultos, que utilizan el dedo índice, y la de los niños y jóvenes, quienes usan el pulgar.

La historia de la evolución humana sostiene la importancia del pulgar en aquellas épocas en que el primate andaba colgado por los árboles, ya que aseguraba la función prensil y de este modo podía aferrarse a las ramas y así sobrevivir. Pero en la misma medida que el hombre se fue irguiendo, está función prensil, fue perdiendo importancia y con ella el pulgar.
Y comenzó la decadencia del pulgar, que ahora es conocido con el peyorativote "dedo gordo".
Esto es tan así que la generación de los adultos utilizan el dedo índice como dedo de primer orden, con él se indica, se señala, se toma el bolígrafo y se hace presión para escribir, mientras el pulgar desempeña un papel secundario, de simple apoyo.
De acuerdo con un estudio realizado por la británica Sadie Plant, directora de la Unidad de Investigación de cultura cibernética en la Universidad de Warwick, los pulgares de los jóvenes son más musculosos y fuertes tanto para el uso de celulares como de juegos de video, y los chicos utilizan indistintamente estos dedos, ya que para aprovechar eficientemente las propiedades de un celular es necesario ocupar ambos pulgares, y esto hace que la nueva generación tenga más habilidad en ambas manos para escribir en el celular en contraposición de la destreza centrada en una sola mano, propia de los adultos.
Concluye el informe científico que la transformación no sólo es física, existe también una dependencia, cada vez más pronunciada, hacia el aparato telefónico móvil, "en cierto casos la tecnología se ha convertido en una segunda naturaleza. Esta es la primera vez que tenemos una tecnología que puede ser fácilmente transportada con nosotros. Es por esto que las personas se sienten completamente perdidas cuando pierden su celular", declaró la doctora Plant.

En síntesis, con el envío de mensajes vía celular la nueva generación crece manipulando teléfonos móviles y esto ayuda a modificar el uso habitual de los dedos desplazando la habilidad del dedo índice al pulgar.
El pulgar tomó revancha, y en esta época de comunicación globalizada, ha permitido que no se emitan mensajes por necesidad sino por costumbre.
¿Cuál será la próxima parte de nuestro cuerpo de la cual se apoderará el vértigo tecnológico?

La autora de este texto es periodista, comunicadora social y docente.

23 nov 2006

NOVEDADES EN “EL TERO” Y “HÉLADE”

Sendos trabajos de Víctor García Costa y
de Juan Carlos Nicolau en los blogs de su autoria

HISTORIAS POCO CONOCIDAS: "LA REUNIÓN
EN NINO O EL PLENARIO DE VICENTE LOPEZ"

"La primera reunión pluripartidista y multisectorial convocada por el general Juan Domingo Perón –nos cuenta el historiador García Costa en este texto-, arribado al país el 17 de noviembre de 1972, después de 17 años y 52 días de exilio, anticipada durante el sábado 18 y el domingo 19 en reuniones previas, por separado, con dirigentes de algunos partidos en su casa de Gaspar Campos 1065, se realizó en la Confitería "Nino" de la Avenida del Libertador, reunión a la que luego se llamó Plenario de Vicente López, Dicha reunión se efectuó el 20 de noviembre de 1972, por mera coincidencia fecha conmemorativa del combate de la Vuelta de Obligado contra la intervención anglo-francesa en el río Paraná. Esa reunión multipartidaria y multisectorial, en su desarrollo resultó una suerte de muestrario, algunos meramente simbólicos y anticipativos, de los conflictos que se avecinarían y de los enfrentamientos que sobrevendrían, empezando por el ocurrido en la puerta de "Nino" entre la representación de la Confederación General del Trabajo, encabezada por José Ignacio Rucci y la Juventud Peronista, así como de las diferentes posiciones electorales que se tomarían."

(Ver texto completo visitando www.vogc.blog.terra.com.ar)


PARA ENTENDER EL PRESENTE:
"CIENCIA, TECNOLOGÍA Y GLOBALIZACIÓN"


"En las últimas décadas y particularmente en nuestros días –nos dice el investigador Juan Carlos Nicolau-, es un lugar común y frecuente hacer referencia a un movimiento de globalización que abarca todo el ámbito terrestre según el cual y a partir de la segunda guerra mundial, existe una tendencia a igualar todas las costumbres y formas de vida sociales en los distintos países. Se habla así de una desaparición de los límites nacionales y una actitud general de la población mundial a adoptar las mismas normas de vida. Sin negar que este fenómeno tenga lugar es necesario señalar que existe la tendencia de considerar el estado de desarrollo de la ciencia y la tecnología, como factores accesorios en la sociedad similares, en cierta forma, al arte y la literatura, es decir apéndices de la política y tal vez de la economía, dejando a un lado su importancia en el progreso de cada período de la historia de la humanidad."

( Ver este trabajo completo en www.keramidis.blogspot.com)

NOTA: AMBOS TEXTOS SON LOS RECOMENDADOS DE LA SEMANA POR AGORA 21

22 nov 2006

NOVEDADES: LINIERS Y EL DELIRIO ARGENTINO

Una admirativa biografía épica sobre Santiago de Liniers

Considerado por el hábito porteño como una de las primeras victimas de la violencia politica argentina –hubo otras y quizás más importantes-, el Santiago de Liniers tratado en el libro de Mario Corcuera Ibáñez (Ediciones de Librería Histórica) concuerda con ese perfil tradicional de la recalcitrante mitología heredada del virreynato del Río de la Plata. Otro texto recomendable es el texto del periodista Sergio Kiernan "Delirios Argentinos" dónde se exponen las fantasías políticas más irreales de la historia argentina que florecieron en nuestro país y que alinearon y aún consiguen numerosos seguidores.

A lo largo de sus 384 páginas Santiago Liniers, primera víctima de la violencia política argentina, Mario Corcuera Ibáñez retoma la figura legendaria del primer héroe porteño, trágicamente exaltado y ejecutado en pocos años, bajo una luz que intenta renovar la imagen de un personaje central de los primeros años de nuestra historia. Hijo menor de una familia noble francesa, el joven Santiago encontró en la carrera militar la salida a esa vocación por el "honor" que -se preocupa por explicar Corcuera Ibáñez- dominó toda su vida y lo llevó a España en busca de oportunidades que su propia patria le negaba.
El relato, sin duda ameno, se acerca a veces a una épica apología del biografiado, por el que el autor no oculta su admiración: Liniers es un "valiente capitán", cuya genuina vocación militar gira en torno a la búsqueda de gloriosas aventuras que le permitan exhibir sus cualidades como marino y soldado. La historia previa de un Liniers que, antes de encumbrarse por su victoria sobre los invasores ingleses de Buenos Aires, tuvo una carrera honrosa pero más bien modesta y rutinaria, se detalla en el libro paso a paso: su llegada al Río de la Plata en la expedición del Virrey Pedro de Cevallos, las alternativas de una vida familiar bastante desdichada e incluso un pintoresco emprendimiento iniciado junto con su hermano para instalar, con permiso real, una "fábrica de pastillas" en el Buenos Aires colonial.
El origen francés de Liniers, en un contexto de guerra franco-española, atrajo desde muy pronto la desconfianza de los peninsulares y cimentó la hostilidad de los líderes del cabildo porteño, que luego lo perseguiría a lo largo de toda su carrera. Desde luego, la parte más importante del libro está dedicada a esos intensos años que, entre 1806 y 1810, lo llevaron del anonimato entre la oficialidad española del Río de la Plata a convertirse en el vencedor de Beresford y Whitelocke, en jefe militar de la plaza y primer caudillo popular de Buenos Aires, consagrado virrey por sus logros militares y la admiración de sus seguidores. Años después, Liniers lideraría una conspiración contra la Junta de Buenos Aires, que fue cruelmente sofocada en Córdoba por las tropas que él mismo había comandado hasta hacía pocos meses, y ante las que cayó fusilado en Cabeza de Tigre, en agosto de 1810.
El libro de Corcuera Ibáñez actualiza la figura histórica de Liniers, considerado desde el título como la "primera víctima de la violencia política" en nuestro país. En tal sentido, su esfuerzo se aproxima al que a comienzos del siglo XX emprendió Paul Groussac, cuando procuró encontrar en el héroe de la Reconquista y de la Defensa un prócer nuevo y distinto de los que desfilan en los inicios de la gesta nacional. Y es verdad que, a propósito del desempeño de Liniers en la Revolución de Mayo, se siguen contraponiendo dos interpretaciones antagónicas: la que lo muestra como un oficial pundonoroso que mantuvo hasta la muerte la lealtad hacia su rey, y la que lo exhibe como el primer enemigo del gobierno revolucionario, que tomó las armas contra sus antiguos partidarios para reducirlos a la obediencia por la fuerza. El Santiago Liniers... de Corcuera Ibáñez aporta, con su sencillez y claridad, una versión en buena medida apologética de ese hombre predestinado que desencadenó un proceso que, finalmente, más allá de su virtud o de su grandeza, lo convirtió en víctima, como sucedió con otros personajes históricos.

Acerca de los "Delirios Argentinos"

Las ideas mas extrañas acerca de nuestra politica surgen en esta coleccion que lleva como sello un concepto asociado a su contenido: "Pasado imperfecto". Es el sello que recientemente publicó, con humor, ironía y la misma sorpresa que el lector, el periodista Sergio Kiernan. En un texto dónde se van desgranando una a una las fantasías políticas más irreales de la historia argentina que florecieron en nuestro país y alinearon a numerosos seguidores.
Por ejemplo, según el índice temático del libro, existieron en el país una especie de internacional socialista que debatió sobre la sociedad sin clases en otros planetas. También una conspiración de todos los Rodríguez del mundo destinada a ocultar la supremacía racial de los morochos sobre los rubios. El Obelisco circuncidado simbólicamente con la sangre de un militante nazi. El Partido Comunista que –según investiga el autor- previene al dictador Videla en plena dictadura militar sobre el riesgo de "pinochetizarse" y le advierte sobre grupos paramilitares. El partido maoísta que asegura que el verdadero imperialismo no es el norteamericano sino el ruso, con agentes locales tan impensados como Amalita Fortabat. La Patagonia como tesoro codiciado por los paisanos judíos que planean instalar allí su segundo estado con "heladera" antártica incluida y otro "complot" encabezado por los gringos yanquis que ahora "vienen por el agua".Cualquier semejanza con la realidad es más que una casualidad. Sin embargo, todo esto se sostuvo y se sigue sosteniendo desde distintos medios en la Argentina.
Disfrazado de discurso político se trata, simplemente, del delirio, el disparate empaquetado con dosis desiguales de solemnidad, paranoia, racismo, chauvinismo, secreto y ansias de grandiosidad. Andrew Graham-Yooll escribe en su prólogo: "Los capítulos de Sergio Kiernan obligan a estas reflexiones a la vez que también invitan a la risa incrédula del lector. ¿Esto sucedía entre nosotros? Increíble. Pero, sí. Ocurrió y todo lo que aquí se lee estaba entre las fantasías más corrientes, que disfrutaban de curso casi legal".
Sergio Kiernan es porteño, nació en 1958 y es periodista desde hace 25 años, lo que tal vez explica su peculiar interés por las ideas políticas más extrañas. Trabajó en diversos medios de Argentina y Brasil, y escribe regularmente para medios de Estados Unidos. Es el editor de la edición dominical del diario Página/12, para el que además cubre actividades neonazis. Fue durante cinco años editor de la revista Noticias, para la que cubrió historias en Medio Oriente, Europa y Africa. También es autor de los nueve informes sobre el atentado a la AMIA publicados en Nueva York por el American Jewish Committee.

Delirios argentinos es el segundo título de la colección Pasado Imperfecto, una nueva serie de textos dirigida por el periodista e historiador Daniel Capalbo que se propone bucear en la historia argentina con un enfoque alejado del academicismo y del bronce que escondió durante años la humanidad e imperfección de nuestro pasado. Los siguientes títulos de la colección serán Moreno, de Miguel Wiñazki y El Loco Dorrego, de Hernán Brienza.
Un nuevo aporte editorial, más allá de la solemnidad, que quizas nos ayude desde el humor entender el extraño pasado de un país que se caracteriza por los insondables desgnios de su inexplicable presente.

13 nov 2006

SALUDAMOS A DOS BLOGS COLEGAS

Los historiadores Víctor García Costa y Juan Carlos Nicolau en la blogósfera

No hace mucho anunciabamos, a través de un trabajo de Stella Maris Fernández de la Peña del Libro Trenti Rocamora que dirige actualmente don Luis Lacueva, la importancia que adquirió en los últimos tiempos este nuevo medio de comunicación. A este trabajo lo acompañaba, además, un ensayo de uno de los especialistas norteamericanos en la materia y, por supuesto, nuestra propia opinión personal.
La mención viene al caso porque recientemente dos amigos –importantes investigadores- han entrado a la blogósfera con sus propios blogs.

En el caso de Víctor García Costa con El Tero en www.vogc.blog.com.ar . Por su parte el Ingeniero Juan Carlos Nicolau con su pagina en www.keramidis.blogspor.com Ambos especialistas, especialmente en temas históricos, han sido ampliamente reconocidos en distintos medios académicos del país y del extranjero y amigos de Agora21. Razón por la cual recomendamos a quienes nos visiten, asistir a las de ellos, dónde encontraran parte de la producción de estos intelectuales argentinos que son valiosas no sólo para el conocimiento de nuestro pasado sino también de nuestro futuro.

Sobre los nuevos blogeros:

Víctor García Costa es escritor, periodista, investigador, historiador, coleccionista y bibliófilo. Nació en Buenos Aires en 1932 y se inició desde muy joven en la política y la literatura. Ha publicado en medios nacionales, provinciales y extranjeros. Integró el Consejo Editor de Sagitario y ha sido director de La Vanguardia en diferentes épocas. Colaborador asiduo de las revistas Historia y de Todo es Historia y co-fundador de Desmemoria. Más de 30 libros jalonan su labor de escritor, entre ellos: Alfredo Palacios. Entre el clavel y la espada, de Editorial Planeta.

Nicolau –por su parte- nació en Buenos Aires. Se graduó de ingeniero en la Universidad Nacional de la Plata en 1951. Realizó investigaciones en el Archivo Nacional de Río de Janeiro (Brasil), en Washington, en el National Archives (EE.UU.), y en el British Museum y National Archives (Londres). Es miembro de la Sociedad Científica Argentina, del Centro Argentino de Ingenieros, de Comité Argentino de Ciencias Históricas y de la Asociación de Historia Económica Argentina. Ha publicado numerosos libros (que iremos reseñando en esta misma página) y en especial Ciencia y Técnica en Buenos Aires (1800-1860) que fuera editado por EUDEBA.

AGORA21 les da, desde este momento, una cordial bienvenida a estas dos plumas destacadas del quehacer intelectual de nuestro país.

Juan Bazán – Editor de Agora21.

7 nov 2006

ENTREVISTA A SILVIO RODRÍGUEZ

Que dice: "lo que sufren los cinco son
los zarpazos de una bestia contra una luz insoportable"

Realizada en La Habana por Arleen Rodríguez Derivet y que
se publica integra en Agora21 por gentileza de ANC-UTPBA.

Para empezar y por si se me desbordaba muy pronto el entusiasmo, le declaré abiertamente mi incapacidad de tomar distancia. No estaba en condiciones de preguntar objetivamente y le expliqué las razones: amo demasiado su trabajo y ahora mismo estoy fascinada por el disco que provoca este encuentro [1].
Su respuesta: "pues yo no", me aclaró en palabras que no solo las canciones de las que hablaríamos pertenecen a una época que jamás se fue de su vida. También se había traído para comentarlas al Silvio que nunca ha dejado de ser, el enemigo implacable de los elogios y las reverencias. El que la gente ama y teme al mismo tiempo, como se ama y se teme a la verdad [2] que es, como el pasado y el futuro, la obsesión de sus textos. Por suerte, reía al responderme y pude ver con alivio que traía un pliego de hojas con las respuestas al cuestionario que adelanté a su oficina pocas horas antes.
Al elaborar las preguntas, me había cuidado de no pedir demasiado. Estaba lejos de pretender "la entrevista" a Silvio. Aunque respeto y disfruto las que tantos han hecho ya, hasta ahora me habían bastado sus canciones (o me refugiaba en esa certeza)[3].
Pero cuando se presentó el disco en el ICAP[4] y Víctor Casaus leyó un texto inmenso en todos los sentidos[5] donde se alegraba de "…compartir con él, con ustedes, estos momentos, aquellos sueños y los sueños que vendrán mañana, cuando también habrá que "escribir textos dignos de los clásicos, de los rebeldes, de los fundamentales que admirábamos" y admiramos…", decidí hablar por los Cinco, que tanto hubieran querido estar allí y no podían. Sé cuánto significaría para ellos, recibir algo al menos de la fuerza de las canciones y del aliento de aquellos años tremendos (1969-1970) que flotaban en el ambiente de la presentación como una hermosa señal de confirmación del vaticinio del poeta: "Cuando escriban la vida los buenos, al final vencedores…"[6]
El resto lo puso este disco de gradaciones diversas, capaz de gustar primero, sorprender después y fascinar finalmente, cuando se juntan su hechura material y su espíritu en el sentimiento que escucha y provoca preguntas y respuestas:

DISCO UNO
- Como prometiste presentar el disco a los Cinco, comienzo por la primera: ¿Por que Oda a mi generación[7]? ¿Nadie te ha dicho que suenan demasiado intemporales sus presupuestos y que puede hacerla suya cualquier joven generación? Por ejemplo, parece hecha para las de los Cinco (al menos dos generaciones), pero igual he sido testigo de que lo sienten muchachos de estos días. ..
- No me había percatado de que Oda a mi Generación podía ser asumida por personas de otro tiempo. Pero ahora que lo dices, veo que quienes son revolucionarios por estar a la altura de sus circunstancias podrían sentir esta canción como propia. También podría decirse que pueden suscribir esta canción los que no se amilanan ante contradicciones, los que quieren ir más allá incluso de sus propias dudas, los que entienden que lo que está en juego, o sea el destino de este país, los trasciende como personas.
Pero hay que decir que no todos tenemos el mismo aguante. Dicen que el umbral del dolor es más sensible para unos que para otros. Por eso, esta no es una canción que califica. No puede serlo porque está escrita desde el desgarramiento.
Esta es la canción de alguien con principios y con conciencia, de pie ante a sí mismo, tratando de responder a cuestiones que no se suelen formular en voz alta. Es que había cosas que era necesario decir y que no estaban dichas. Me parecía que pronunciarlas era una necesidad incluso colectiva, una forma de exorcizarnos de temas que pueden llegar a parecer colosales en la medida en que pasa el tiempo y no se abordan, que ni siquiera se pronuncian para empezar a despejarlos.
Tratando de enfrentar uno de esos temas que suelen parecer tabúes, al final de la canción hice una especie de aviso. Mencioné la posibilidad de que un día no aguantara más exigencias y reventara. Creo que esa es la parte que pudiera resultar más incomoda del texto. Siendo, como somos, habitantes de un país asediado, realidad que nos obliga a superarnos y a ser resistentes, mencionar la posibilidad de cansarse puede ser interpretado como un insulto a la conciencia nacional.
Por mi parte siempre me interesaron los antihéroes. Esos que lloran y se rinden de cansancio, los que claudican -no por ser malos, sino porque sencillamente no pueden más-, son personajes muy a tomar en cuenta. La literatura, el cine, el teatro y más que nada la vida misma, está llena de esos caracteres humanos. ¿Por qué no habrían de tener cabida en la canción?
Contar todo esto a verdaderos héroes de la resistencia y a sus familiares puede parecer insensible. Pero quedamos en hacer este programa para comentar y profundizar en los temas de este disco y creo que esta es una faceta fundamental de la canción. También hay que decir que no hay mejor forma de honrar que ser honestos.
O sea, que Oda a mi Generación fue un tema un poco maldito, parte del mito negativo que me ha perseguido. Pero yo no me resigné a aquel juicio limitado. Por eso la primera vez que me invitaron a cantar en presencia de Fidel, lo primero que hice fue contar la leyenda negra y cantarle la canción al Comandante.
Esto último preferí no mencionarlo en el disco, pero ahora lo cuento aquí, entre compañeras y compañeros.
- Menos mal que existen...las canciones (Todo el mundo tiene su Moncada), que con el titulo se explican solas, pero sin él, pueden relacionarse con otras historias. Celia, la hija de Haydeé, me la pidió un día en el programa porque dijo que "era la que mejor le sentaba a los Cinco". ¿Que te parece?
- Me parece que Celia tiene una gran conexión con su mamá. No solo porque Todo el mundo tiene su Moncada haya sido compuesta por petición de Yeyé, sino porque Yeyé fue moncadista y los Cinco también lo son, a su tiempo y manera. Ellos están viviendo todavía su propio Moncada, que es más largo y en algunos aspectos tan o más difícil que el Moncada original. Hay que decir que parte del sosiego de nuestras vidas, parte de la paz de que gozamos está abonada por los que murieron en el asalto al Moncada y también por el sacrificio de los Cinco. Esa es una verdad incuestionable.
- No aparezcas mas sin avisar...según la presentación del disco, es un complemento (¿cantado por fin solo una vez o nunca?) de Ojalá. Pero se le advierte también cierto parentesco con Tu fantasma, la canción preferida de Gerardo y Adriana[8]...
- Como ustedes comprenderán, eso último se debe a una rotunda casualidad. Pero es una fortuna que así sea. Puede que la haya cantado alguna vez, pero yo no lo recuerdo.
- Más de una vez... me hizo reír sola. Me divertía mucho pensar que a alguien como tú mas de una vez lo echaron a la calle "por callar donde debo estar hablando, por hablar donde debo estar callado... por fumar en los palcos del teatro, por hacerle una mueca a mi maestro..." Pero por la presentación del disco, supe que las concebiste sobre un barco (de ahí nunca te podían echar) y además aclaras que ahí te pintas como "el gamberro que no eras"¿Fuiste por fin o no ese que echaron más de una vez a la calle por desafiar convencionalismos?
- Cuando dices que te divertía "pensar que alguien como" yo... estas revelando la gran discrepancia de visión que tenemos de la misma persona.
Lo primero que debo decir es que esta canción usa lenguaje figurado. Eso de "darle de mi alcohol a algunos niños" no es posible tomarlo al pie de la letra. Es otro tipo de alcohol el aludido, es una ironía contra los que pensaban que yo podía estar envenenando las mentes de otros jóvenes. Sin embargo pudiera decir que en la vida real he traspasado ciertos límites y que entre mis infracciones contables hay algunas que fueron totalmente involuntarias. Por ejemplo, las quejas que llegaban a la UJC sobre unos tenis sucios que yo usaba, se debían a que por entonces yo no tenía otro calzado que ponerme. Sin embargo quien resolvió aquel grave delito no fue la Juventud sino Haydeé Santamaría, que un día nos consiguió zapatos.
Por supuesto que cometí transgresiones deliberadas de algunas normas cívicas, e incluso puede que algún acto descrito como figura penal. Aunque aclaro que lo único que he robado en mi vida ha sido libros, y muy pocos. Tampoco he agredido a nadie, al menos físicamente. Mis conductas antisociales tienen su origen por una parte en la bohemia y por otra en el sentido de libertad que se ejerce cuando se necesita abarcar el mundo; también de la curiosidad natural que puede tener cualquiera. Hay un momento de la vida en la que uno rompe completamente con los cuentos de camino.
Espero que a nadie le suban los colores con esto, porque sería una inútil pérdida de colores. Yo no siento la más mínima vergüenza por haber ejercido la existencia con toda la intensidad que ha estado a mi alcance. Prefiero despedirme de la vida habiendo pecado más par exceso que por defecto.
- Dice Elizabeth[9] que ella escucha El día en que voy a partir, pensando que bien pudo haberla escrito Ramón...
- Eso es conmovedor. Por eso pienso que las canciones nunca están terminadas hasta que llegan a sus destinatarios, que son quienes a fin de cuentas las completan.
- Palabras, ¿es una queja o una esperanza?
- Palabras es la canción de un abrumado por el costo de llegar hasta un punto y desde allí hace un cálculo de cuánto le pudiera faltar. Es una canción que maldice ciertas insuficiencias, incluso algunos discursos que han resultado ser solo palabras. Pero más que nada esta canción es el deseo de que algún día podamos contarlo todo, sin cortapisas: tanto las celebraciones por la justicia satisfecha como las quejas por las esperanzas pendientes. Digamos que es una utópica canción que invoca la plenitud.
- Nunca he creído que alguien me odia. Esa canción es psicología sin academia y es política sin panfleto. Y su explicación en el disco es impresionante[10]. ¿Te gustaría agregar algo a eso, hablando para gente que esta presa por enfrentar al odio que mata sin avisar?
- Como en Resumen de Noticias y en otras, en esta canción me salí de lo anecdótico y traté de explicarme las cosas, no desde la perspectiva del implicado, sino tratando de llegar al fondo, al origen de la situación. O sea, lo que canté es la explicación que me hice a mí mismo de lo sucedido. Y es que nunca me han gustado, o más bien nunca me he creído ciertas simplificaciones extremistas. Eso funcionaba bien con una bruja mala y una princesa buena. Así es muy fácil describir al mundo, pero también resulta elemental. Esa caricatura es el mejor caldo de cultivo para luego sentirnos defraudados y acaso justificar el seguirnos portando como bárbaros. Así que yo tenía muy claro que no me podía permitir caer en la superficialidad que pretendía cuestionar.
Ahora bien: no es fácil eso de agregar algo para hombres que están presos por enfrentar algo tan ciego como el odio. Porque es prácticamente imposible transpolar aquella menuda incidencia de mi vida a la causa trascendente de los Cinco.
Ellos son hombres que están resistiendo el embate de siglos de historia, la presión de injusticias que se han convertido en costumbres, en leyes, en poder aparentemente inamovible. Ellos son como la anunciación del mejoramiento, resistiendo en sus celdas el peso de arraigos ancestrales. No sé si humanamente servirá de consuelo comprender que lo que sufren son los zarpazos de una bestia contra una luz insoportable.
- La historia de Terezin me dejó muda...es muy cinematográfica. ¿Cómo pudo salir tanto de un simple libro infantil?
- Es que no es nada simple ese libro infantil. Los dibujos muestran a niños detrás de cercas de alambres de púas y por encima de ellos nubes y pájaros volando. Se ve a la triada familiar, Mamá, Papá y Nené, los tres con la estrella de Judea que les obligaban a llevar. Algunos de los poemas son desoladores, hablan de seres queridos desaparecidos. Pero los más terribles son los que conservan toda la inocencia y frescura infantil, los que hablan de animalitos, de personas y de cosas que los hacen felices. Ese libro es muy amargo, pero no debiera dejarse de editar jamás. Es el alegato más contundente que conozco sobre los genocidios.
Terezin fue grabada para que fuera parte de Cita con Ángeles, pero donde quiera que la ubicaba, se me salía de contexto. Gracias a eso tuve la idea de crear un ambiente donde la canción se acomodara. Y ¿qué mejor ambiente que entre las canciones de su tiempo? Así se convirtió en la primera piedra de "Érase que se Era".
- ¿Qué fue de Judith[11]? ¿Cuidó sus estrellas? ¿Se puede hacer una lectura de esta canción y de Una Mujer, mas allá de lo que dices de ellas?, ¿pueden ser dos modos de decir que es posible el amor en la diferencia, entre ellos y nosotros[12]?
- Judith me fue a ver actuar a México, cinco o seis años después de todo aquello. Fue con su novio, un muchacho inmenso y rubio, de aspecto bonachón. Me contó que estaba feliz y que estudiaba enfermería en una ciudad del sur de los Estados Unidos; me dijo que en las vacaciones se iba a Canadá, con algunas compañeras de clase, a bailar ligera de ropas en los cafés, para reunir dinero para pagarse los estudios. Me sorprendió un poco aquella historia, pero ella no parecía afectada. En su medio esa era una forma normal de pagarse la universidad. Supongo que desde hace muchos años debe ser doctora. Ojalá le queden brillando muchas constelaciones.
- Martianos: "Quiero que pare la muerte, yo quiero que pare el frío para poder dedicarme a flor, a viento, a río." Desde el título, esta canción es muy martiana y es también una síntesis de los Cinco, pero la hiciste en 1969. ¿Alguna vez has reparado en la frecuencia con que tus metáforas se vuelven la vida?
- Debe ser que yo me fijo en cosas que pasan siempre, que pasan una y otra vez; cosas que aunque han pasado muchas veces nos dan la sensación de estar ocurriendo sólo para que nosotros las descubramos y las estrenemos. Yo creo que todo lo que cantamos debe haber sucedido millones de veces desde que el mundo es mundo. De eso casi que no tengo dudas.
- La canción de la Trova. Pretender explicarla sería un abuso de redundancias. Pero esta versión con Adriano Rodríguez parece querer redundar justamente cuando ambos cantan que "la guitarra es la guitarra sin envejecer. . ."
- Esa canción la canté una vez en un festival de la trova tradicional en Santiago de Cuba, ante Rosendo Ruiz, uno de los pilares de la canción, y me valió para que aquel señor me estrechara la mano y me diera ánimos para seguir "por ese buen camino". Por La Canción de la Trova los más antiguos repararon en mí. Yo la quiero por eso.
- El seguidor de arco iris: "Que miedo a quedarse -quedarse a qué miedo- ¿Es esa la autocrítica?
- La autocrítica está en admitir que no queríamos responsabilidades, sobre todo familiares. Hay ciertas etapas que son para quemarlas, lo que te permite no tener que añorarlas después. Eso es lo que me estaba pasando a mí y lo que entonces creí que le pasaba a otros.
Después algunos nos fuimos comprometiendo o fuimos comprometidos. Otros siguieron en una bohemia perpetua, hasta que la mala vida y la cirrosis se los lIevó. Sólo puse a tres amigos muy especiales de esa lista, que en realidad es mucho más extensa.

DISCO DOS
- El papalote, una de las más conocidas canciones de este disco, suena sin embargo tan diferente que parece nueva, casi como una sorpresa, hasta el estribillo. ¿De quién es la culpa, de Silvio, de Maykel o del Tres?
- Tenía esa deuda pendiente con El Papalote. La versión que hice con el GES[13] quedó un poco desordenada, todavía no teníamos mucha disciplina en las grabaciones. Esta es una canción ciento por ciento autobiográfica. Todo lo que ella cuenta ocurrió. Tenía la deuda sobre todo con Narciso el mocho, con él y con su tipo de personas, que son tan importantes y nadie se da cuenta hasta que mueren y pasan a la tierra de los elegidos, la de esas historias que a veces se trasmiten de una generación a otra.
No sé por qué la notas tan distinta. Esta versión tiene prácticamente las mismas notas. Quizás lo que sucede es que el arreglo esta más lleno, tiene más flautas, los coros están mejor cohesionados y hacen armonías, no como los de la primera versión, que cantaban al unísono. Creo que todo el concepto sonoro está más madurado, creo que no hay una nota de más ni una de menos, por eso puede que se escuche con más rotundidad.
- También suena muy diferente esta versión de Fusil contra fusil, pera lo que más impresiona son las historias que cuentas de la canción, eso de que te apuntaba alguien con un revólver desde la primera fila del Auditorio Nacional de México y que luego te la pidieron mineros bolivianos de la mina siglo XX, donde difícilmente se escuche alguna vez cualquier música. ¿Será que la canción se hizo parte de los mitos que acompañan al Che?
- Yo puse Fusil Contra Fusil en parte porque a Niurka le gusta y me lo pidió, y también porque el Che había sido muy importante para mí en aquellos tiempos y sentía que era imprescindible su presencia. Desde el principio tenia muy claro que tenía que diferenciar esta versión de la del GES, que es muy vital, como los tiempos originales. Así que trabajé partiendo de una grabación de voces que hice con Sexto Sentido[14]. Yo les grabé su parte cuando aun no había escrito ni una nota para la nueva versión y la espacialidad de sus voces influyó en la elaboración posterior. Fue una forma diferente de trabajar, pero a veces el azar también juega su papel. Aproveché que ellas estaban en el estudio, no sabía si iban a tener tiempo otro día, así que les dije: vamos a hacer estas armonías, vamos a crear esta atmósfera. Y ese fue el punto de partida.
- El matador es un exorcismo de violencia, dices tú, pero, ¿no es también una autocrítica, no de Silvio, sino del ser humano y el animal que lo habita?
- Creo que tú la describes mejor que yo. En cualquier caso es una canción contra la violencia, en la que me incluía, porque yo era antes más violento que ahora. Era más agresivo en general, seguramente por ser parte de un complejo mundo de agresiones. Así que también es una canción autocrítica, porque a mi inteligencia no le gustaban algunas respuestas de mi furor. Para mi lo cuestionable es la ferocidad ciega, incompatible con la piedad humana. Lo rechazable es lo cruel, lo bestial, no lo animal, porque animales somos y seguramente seguiremos siéndolo, al menos por un tiempo.
- Hoy es la víspera de siempre, otra canción que podría inspirarse en los Cinco, si no la hubieras escrito en 1968...
- No entiendo cómo esa canción pudiera estar inspirada en los Cinco, así que ahora te corresponden a ti las explicaciones.
- …me refería a que para ellos siempre es la víspera del día en que esperan por la justicia.
- Eso es distinto.
- Por muchos lugares, es muy filosófica. Hay tanto de otras en nosotros y viceversa, sin embargo "por eso no es raro que muchos no entiendan...", que paradoja. . .
- Por muchos lugares fue una especie de ensayo formal. Yo estaba empezando a jugar con estructuras fijas y con textos más densos. AI principio me entusiasmó, pero con el tiempo llegué a considerarla un ladrillo.- Cuántas veces al día es un duro alegato contra el acomodamiento, la pereza, el miedo, contra tantas cosas..¿Por eso siempre has sido tan directo en tomar partido y expresar compromiso?
- Hay una canción que se llama Yo te invito a caminar conmigo, de esa misma época, que dice: "Con el oportunismo tengo un duelo,/con las cabezas como el hierro viejo/y sin embargo estoy amando/y abro un trillo sobre el fango".
Yo le pegaba duro a todo lo que pensaba que era oportunismo, yo era incluso insolente. Supongo que algunos escucharían aquellos textos y pensarían: "¿Qué se habrá creído este tipo?" Y era que yo estaba aun lo suficientemente cerca de la niñez como para creerme listo para el gran cambio. O sea, según José Ingenieros yo no tenía complicidad con el pasado, era cabalmente joven y estaba listo para un nuevo tipo de mundo, que por otra parte todavía solo era un sueño para el que apenas se estaban sentando bases.
Yo no estaba solo en eso, la mayoría de la primera remesa de la llamada nueva trova tenía conflictos parecidos. Se le pedía sacrificios a la gente que los demandantes no hacían. Los que me botaron del lCR por decir que Los Beatles habían borrado las barreras entre la música culta y la popular, tenían todos los discos de Los Beatles, yo no tenía ninguno. Yo tenía discos de Vivaldi y de Mozart, que compraba en la casa de la cultura checa. Ellos compraban a Los Beatles cuando viajaban al extranjero, o los mandaban a buscar con amigos, como más tarde me enteré. Ese tipo de cosas era muy decepcionante pero yo nunca la cogí con la Revolución. Pensaba que todo aquello era producto de la hipocresía oportunista y me cuidaba de botar el sofá, o sea de echarle la culpa a la Revolución. La verdad es que no tenía piedad con el oportunismo.
A veces se cometía una injusticia y alguna gente se callaba, para no señalarse y no salir perjudicado. A ese tipo de persona, que todavía existe, esta dedicada Cuantas Veces al día.
- Explicando El barquero, llamas a Vicente Feliú el mejor perito en Silvio antiguo que te queda. ¿Es que hay un Silvio moderno?
- El Silvio antiguo es el anterior a Días y Flores[15], ese que estaba disperso en grabaciones de varias instituciones y también en la memoria de algunos de sus amigos. Hay canciones que nunca grabé, como es el caso de El Barquero. Sin embargo hay un arreglo maravilloso de esa canción que Enriqueta Almanza hizo para Elena Burque. Ese arreglo lo escuché en la década del 80 en el archivo de música de la televisión, cuando estaba a cargo de un enamorado de aquella colección, llamado Juanito La Torre. Fue un fallo mío no pedirle que me lo copiara. Ahora nadie da con él. Sería la prueba viviente de que esta versión de El Barquero está adulterada. Aunque por suerte siempre podría apelar a la licencia que debe tener el autor.
- En Discurso fúnebre declaras que para ciertos asuntos no has crecido mucho todavía. Y al explicarla te cuentas militante de la infancia. ¿Cuanto de niñez acreditas en el hombre que este año cumple 60?
- A mi me parece que mucha, aunque no sé si todavía estoy listo para el gran cambio. Cuando yo era adolescente tuve un amigo espiritista de 70 años, llamado Tomás Mendoza, que siempre decía que la revolución era para los jóvenes. Y que Fidel deberla fusilar a todos los que pasaran de 30 años. Por supuesto que lo decía muerto de la risa, pero en broma y todo no dejaba de tener algo de sentido.
- Recuerdo cuando dijiste en la presentación del disco que creías que Epistolario del subdesarrollo necesitaba explicación para los jóvenes hasta que los muchachos que la hacen contigo te preguntaron si era nueva. Yo también creo que no necesita explicación, pero la mención de Noel, a quien está dedicado el álbum sí merece un comentario tuyo.
- Eso que cuento en el primer párrafo pasó creo que en Bauta, en un centro de trabajo donde solo había mujeres. A mitad de canción nos preguntaban si no nos sabíamos alguna de las canciones que sonaban por la radio. Nosotros no llegábamos a ofendernos del todo, nos dábamos cuenta de que estábamos viviendo una experiencia macondiana[16] y no dejaba de ser también divertido.
Yo viajé y canté mucho con Noel, sobre todo hicimos varias giras por México, algunas de dos o tres meses. Noel y yo, salvo una o dos excepciones muy al inicio, nos llevamos muy bien. Siempre admiré mucho sus canciones, su creatividad.
Recuerdo que sentados en una ruta 27, bajando por G entre 25 y 23, le pregunté si había leído la poesía de Vallejo[17]. Me dijo que no y de entre los papeles que llevaba saqué la antología de Casa de las Américas y se la di. Poco tiempo después me sorprendió con las primeras musicalizaciones de Poemas Humanos y de Trilce. Yo siempre lo "chivaba", diciéndole que me debía la dedicatoria de ese trabajo, que hasta donde conozco es el mejor que se ha hecho con la poesía de Vallejo.
- Érase que se era una vez... Cuéntanos qué sentiste el día de la presentación de este disco, cuando estaban allí Víctor, Vicente, Sara, Amaury y todos nosotros los que te seguimos como a un predicador desde aquellos días en que ustedes cambiaran el destino de la canción y nos hicieron a tantos militantes de la trova. ¿Eres consciente de todo lo bueno que ustedes sembraron en las generaciones siguientes con sus canciones, pero también con sus actitudes ante la vida?
- Predicador es el pastor Raúl Suárez, no yo. Para quienes me ven como predicador escribí la canción Derecho Humano[18]. Hay otras con las que también me defiendo de los espejismos que la admiración desmesurada puede provocar. Si esas ilusiones quedaran ahí, no habría problemas, pero después algunos esperan que uno se porte como el héroe que tienen en sus cabezas y no hacen más que ponernos en aprietos, porque de lo que si no hay dudas es de que no soy ningún héroe, sino un simple autor de canciones.
Los héroes son los que estamos celebrando y saludando hoy aquí, desde estos pequeños estudios que se llaman Ojalá[19]. Sirva ese nombre para desearles lo mejor: que esa prisión fecunda desaparezca cuanto antes y que muy pronto se puedan reunir con sus familiares y con el pueblo que los espera.



[1] "Érase que se era". Al asistir a su presentación a mediados de este año, le recordé a Silvio que para los cinco jóvenes cubanos presos en cárceles norteamericanas, sus canciones significaban tanto como para cualquier de nosotros, pero eran, además, fuente fundamental de sus admirables resistencias. Como no hay otro modo de que puedan escuchar el disco en sus prisiones, Silvio prometió comentar cada una de sus canciones en el programa dedicado a los Cinco que Radio Rebelde transmite los domingos de 10 y 30 a 12 de la noche. [2] "…pero cantar es difícil porque hay que querer la verdad mucho más que la misma canción…La verdad no ha existido jamás, todo depende de la hora de hablar…" dijo en La defensa del trovador.[3] El 4 de enero de 2005, Juventud Rebelde publicó bajo mi nombre la versión que hice de una entrevista de los Cinco a Silvio, donde nuestro programa fue solo el intermediario de un diálogo armado con las preguntas que los héroes enviaron a través de sus familiares. [4] Primeros días de agosto de 2006.[5] Ver: Víctor Casaus: Palabras en la presentación de "Érase que se era" en www.trovacub.com.[6] Rosana del disco "Descartes".[7] Todas las letras del disco en La página de Silvio Rodríguez ( http://patriagrande.net)[8] Gerardo Hernández, uno de los Cinco, condenado a doble cadena perpetua más quince años y Adriana Pérez su esposa, impedida por la administración de George W. Bush del derecho de visitarlo en prisión, al negarle reiteradamente la visa de entrada a Estados Unidos bajo diferentes pretextos, todos falsos.[9] Elizabeth Palmeiro, esposa de Ramón Labañino, uno de los Cinco.[10] Aquí Silvio cuenta de alguien que le confesó que una vez lo esperó a la salida de un concierto para matarlo.[11] Nombre de la novena canción del disco e inspiración de otras dos.[12] Léase cubanos y norteamericanos.[13] GES: Grupo de Experimentación Sonora (del ICAIC)[14] Grupo vocal que interviene en el disco.[15] El primer disco grabado por Silvio.[16] De Macondo, el pueblo imaginario de Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez.[17] César Vallejo, el poeta peruano.[18] "Yo pido pues que no me admiren/yo pido pues que no me sigan/ que solo estoy cantando un poco por cantar…"[19] La entrevista se grabó finalmente en los estudios Abdala, pero vale la alegoría del Ojalá que nombra a los estudios donde Silvio preparó las respuestas.